Defendamos la paz

No más asesinatos de líderes sociales. ¡Basta! Es la hora de salir a las calles a manifestar nuestro profundo repudio a estos hechos demenciales que siguen sumiendo a Colombia en un río de sangre de hombres y mujeres cuyo único delito fue querer un país en paz, más amable, equitativo y justo.

Estos asesinatos sistemáticos no paran. En este último mes han perdido la vida diez líderes. Duque, la marioneta, sale a decir que “es muy difícil y complicado garantizarle la vida a todos los líderes”. Esta declaración en otro país le hubiera valido la destitución inmediata. Pero aquí no sucede nada. Se nos quiere convencer que ‘uribito, el Einstein colombiano’, es una pobre víctima, mientras cientos de personas están siendo amenazadas, desplazadas y asesinadas.

NO MÁS. Este viernes 26 de julio, el país entero, el país que SÍ quiere la paz, el que repudia los falsos positivos, el que ve con horror lo que está sucediendo, saldrá a las calles a las cinco en punto de la tarde.

En Colombia marcharán Bogotá, Armenia, Barrancabermeja, Barranquilla, Bucaramanga, Buenaventura, Cali, Cartagena, Ciénaga, Duitama, Florencia, Santander, Guacarí, Jamundí, Maicao, Medellín, Mocoa, Neiva, Pasto, Pereira, Puerto Libertador, Tumaco, Tunja, Valledupar, Sincelejo, entre obras ciudades. En todas la cita es a las cinco en punto de la tarde.

En el exterior habrá manifestaciones en Londres, Madrid, Atenas, Berlín, Munich, Buenos Aires, Estocolmo, La Haya, Gran Canarias, Montreal, Santiago de Chile, Washington, Winnipeg y otras que en este momento se me escapan.

Estos asesinatos a sangre fría, calculados, tienen paternidad responsable. No son fruto del azar. No quedarán impunes. La imagen de esa joven asesinada en presencia de sus hijos y ante la mirada indiferente o aterrorizada de la gente, no se puede repetir jamás.
Frases amenazadoras como “ Estás jodiendo mucho; cierra la jeta si no quieres la muerte”.

-“Te vamos a hacer lo mismo o peor que a María del Pilar...”.
-“Morirán por sapos, marihuaneros, metiches...”.

-“Es más peligroso ser líder social que estar al margen de la ley...”. (Palabras de un líder amenazado).

El Gobierno trata de endilgarle la responsabilidad a las Águilas Negras, a los exFarc reincidentes, a los Caparrapos, a Raymundo y a todo el mundo, minimizando las “órdenes de los altos mandos”... Y se niega a reconocer que todos los asesinados tienen un mismo perfil: líderes sociales, comprometidos con restitución de tierras, defensores de los derechos humanos, gente defensora de la paz, gente de bien, que no cuadra con la ideología del Gobierno actual, que ya sabemos cuál es...

Este Bicentenario de sangre, violencia, caudillismos, politiqueros, inequidades, corrupción y mentiras tiene que terminar para iniciar una Colombia nueva; un país donde la vida sea sagrada y los funcionarios públicos honestos. Un Congreso respetable, un Presidente que esté a la altura de su cargo y de sus responsabilidades. Un Ejército ético. No es mucho pedir y Sí es posible.

¿O tendremos que aguantar otros docientos años de barbarie?
PD: En Cali la cita es a las 5:00 p.m. en la Plazoleta de San Francisco. Caleños. Unámonos al grito ¡No Más lideres asesinados! ¡No más sangre derramada. No más!

PD: Esta Marcha nacional e internacional será pacífica. Demandamos respetar los derechos humanos. Una justicia justa. Un Gobierno que cobije a todos los colombianos. Sí se puede. ¡Lo demás es demencia! Calificar a los que disentimos de guerrilleros, comunistas, violentos y apátridas es solo una cortina sangrienta para alimentar el odio y la polarización. ¡No más!
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