El pais
SUSCRÍBETE

El espíritu del Evangelio

El Evangelio de este día, nos muestra su espíritu. Los discípulos se...

26 de junio de 2016 Por: Arquidiócesis de Cali

El Evangelio de este día, nos muestra su espíritu. Los discípulos se indignan porque en aquel pueblo no quisieron recibir al Maestro y quieren que a sus habitantes les caiga fuego del cielo, pero Jesús los reprende, porque ese no es el espíritu del Reino que Él predica.Hoy Colombia está frente a una situación que podríamos comparar con la que se presentó en aquel pueblo de Samaría. Los acuerdos que el Gobierno hace con las Farc en Cuba, han dividido a los colombianos. No se trata de que unos quieren la paz y los otros no, nadie en Colombia quiere la guerra. La diferencia está en la forma como se ha querido llegar a la paz. Ahora bien, el espíritu del Evangelio nos enseña que no podemos pedir fuego del cielo contra aquellos que piensan distinto a nosotros, esto no quiere decir que no podamos mantener y defender nuestros puntos de vista y criterios. El Presidente de la Conferencia Episcopal, en el comunicado que hace para todos los fieles dice en nombre de la Conferencia.1. Reconoce este Acuerdo como un acontecimiento histórico para el país, el cual se espera que sea el primer paso para construir la paz tan anhelada por los colombianos, bajo la garantía del respeto de los derechos humanos y la promoción de la justicia en todos los rincones del territorio nacional.2. Este paso que se está dando es el primero de muchos otros que deben acordarse en la edificación de la paz, entre los miembros de las Farc-EP y el Gobierno, con el fin de reconstruir con esperanza, respetando siempre la institucionalidad, el derecho nacional e internacional, el país que soñamos y queremos.3. Es necesario que el Gobierno ofrezca a la opinión pública, a través de una pedagogía para la paz, una información suficientemente clara sobre los Acuerdos, que ayude a los colombianos a superar las dudas que han generado temores frente a lo decidido.4. Ante la dejación de las armas, es perentorio que existan protocolos claros y públicos, que informen sobre el procedimiento para la destrucción de las mismas. 5. La Iglesia Católica que ha estado al lado de las víctimas durante todo el tiempo de la guerra, también acompaña este momento histórico de Colombia con el propósito de seguir ofreciendo su servicio, para que los gobernantes construyan una Nación que respete la democracia, la libertad y los derechos humanos y favorezcan los procesos de perdón, reconciliación y paz.Y el Prelado nos insiste en orar para que todo llegue a buen fin.

AHORA EN Arquidiocesis De Cali