El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Mundo

Artículo

Violencia política en Egipto dejó 54 muertos en jornada del lunes

Seguidores de Mursi y Ejército se enfrentaron en jornada que dejó 54 muertos.

9 de julio de 2013 Por: Elpaís.com.co | Resumen de agencias

Seguidores de Mursi y Ejército se enfrentaron en jornada que dejó 54 muertos.

Al menos 54 personas, en su gran mayoría simpatizantes islamistas (del presidente Mohamed Mursi), murieron y otras 435 resultaron heridas el lunes en Egipto en la jornada más cruenta desde el golpe militar del pasado miércoles, que ha disparado los temores al estallido de una confrontación civil.Los sucesos, sobre los que los Hermanos Musulmanes y el Ejército ofrecen versiones opuestas, han aumentado la ya alta tensión y llevado al jeque de Al Azhar, la institución más prestigiosa del islam suní, Ahmed al Tayeb, a pedir un acuerdo de reconciliación “antes de que el país caiga en la guerra civil”. Incluso antes de que concluyese el conteo de víctimas, había versiones contradictorias sobre cómo comenzó la violencia.Los manifestantes partidarios de Mursi dijeron que las tropas atacaron su campamento sin provocación justo después de que ellos habían concluido sus rezos matutinos. Las Fuerzas Armadas sostienen que los soldados fueron blanco de disparos por pistoleros que mataron a un oficial del Ejército y dos policías, aunque su recuento de lo sucedido dejó muchas interrogantes sin respuesta. Testigos ajenos al campamento de protestas indicaron que los soldados parecían estar avanzando para desalojar el lugar y estaban arrojando gas lacrimógeno cuando estalló la balacera. Una mujer dijo que le parecía que los primeros disparos provinieron del lado de los manifestantes, pero otros dijeron no estar seguros. Los choques duraron tres horas, en las que los manifestantes lanzaban piedras y bombas incendiarias desde techos y se escuchaban disparos. Clínicas cercanas administradas por partidarios de la Hermandad Musulmana se vieron inundadas de manifestantes heridos. El presidente interino, Adli Mansur, puesto por los militares en sustitución del islamista Mohamed Mursi, ha formado una comisión judicial para investigar de urgencia los hechos ocurridos frente al cuartel general de la Guardia Republicana en el barrio de Ciudad Naser, donde se cree que está retenido Mursi. También instó a los manifestantes a alejarse de “los centros vitales y las instalaciones militares” del país e insistió en que la seguridad nacional debe ser la prioridad para que el periodo transitorio termine lo antes posible.Tras las dimensiones del drama, los Hermanos Musulmanes y su brazo político, el Partido Libertad y Justicia, emitieron sendos comunicados en los que acusaban a las fuerzas de seguridad de haber cometido una “masacre” y llamaron a los egipcios a lanzar una “intifada”.Ante la creciente tensión, el principal partido salafista, Al Nur, llamó a un “diálogo nacional sincero” para la reconciliación, si bien uno de sus dirigentes confirmó que, tras las muertes, su formación se ha retirado del proceso político anunciado por los militares.“Llamamos a imponer la voz de la razón y de la sabiduría y a empezar directamente un diálogo nacional sincero para empezar una reconciliación verdadera”, aseguró en un comunicado.La Fiscalía ordenó cerrar y precintar la sede del brazo político de los Hermanos Musulmanes en el centro de El Cairo, tras hallar supuestamente armas en su interior, informó la televisión estatal egipcia.EE. UU. pide moderación El Gobierno estadounidense, por su parte, pidió a las Fuerzas Armadas de Egipto que apliquen la “máxima contención” para evitar una espiral de violencia en el país.La portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, dijo ayer que EE. UU. está “profundamente preocupado por la violencia y la polarización” en Egipto, y pidió también a los manifestantes partidarios de Mursi que opten por protestar de manera pacífica.Psaki opinó que la situación es “muy violenta, con muchas partes que están contribuyendo a la volatilidad” y pidió una solución negociada entre las partes de manera pacífica.Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, pidió contención a todas las partes ya que “el proceso democrático está en juego” en el país, al tiempo que caracterizó este período como de “transición” hacia un nuevo gobierno civil.“Estamos enfocados, con respecto a Egipto, en un proceso democrático que eche raíces y que un proceso de reconciliación tenga lugar”, indicó Carney.La Casa Blanca aseguró que aún está revisando si la toma de poder por parte de las Fuerzas Armadas tras las protestas callejeras contra Mursi constituye un golpe de Estado, lo que obligaría según la ley a suspender la ayuda militar a Egipto, que ronda US$1300 millones anuales, bajo el nuevo régimen.“No iría en nuestro mejor interés cambiar inmediatamente nuestros programas de asistencia a Egipto. Estamos revisando nuestras obligaciones bajo la ley y consultaremos con el Congreso cómo proceder en lo referente al paquete de asistencia que proveemos”, explicó Carney.Agregó que “pedimos la vuelta de gobiernos democráticos, con gobernabilidad y democráticamente elegidos”, tras reiterar que Estados Unidos no toma parte en el conflicto por uno u otro bando.

AHORA EN Mundo