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Primer ministro francés Manuel Valls renuncia para postularse a la presidencia

El anuncio se produjo días después de que el presidente de Francia, François Hollande, anunciara que no aspirará a la reelección.

6 de diciembre de 2016 Por: Elpais.com.co / AFP

El anuncio se produjo días después de que el presidente de Francia, François Hollande, anunciara que no aspirará a la reelección.

El primer ministro francés, Manuel Valls, presentó su renuncia este martes, tras haber anunciado su candidatura a la presidencia, por lo cual el presidente François Hollande nombrará un nuevo gobierno a cinco meses de la elección presidencial de mayo de 2017.

En la víspera, Valls anunció que iba a participar en las elecciones primarias del Partido Socialista que debe designar el candidato a la presidencia.

Este anuncio se produjo pocos días después de que el presidente, François Hollande, en caída libre en los sondeos, anunciara que no se postulaba a la reelección. 

En su discurso de este lunes, Valls defendió su gestión y reiteró su lealtad a Hollande y el orgullo que siente de haber participado en el gobierno, tras haber sido nombrado primer ministro en marzo de 2014.

Ahora Valls, nacido en España hace 54 años, que optó por la nacionalidad francesa a los 20 años, tiene previsto consagrarse enteramente a la campaña para las primarias del 22 y 29 de enero. 

Sin embargo, Valls concurre sin ninguna certeza de ser electo, confrontado a muchos candidatos que están más a la izquierda. 

La formación del gobierno, en cambio, se proyecta como un proceso rápido. Desde hace varios días suenan varios candidatos dentro del propio ejecutivo. 

Entre los nombres que figuran para reemplazar a Valls están los de los ministros Bernard Cazeneuve (Interior), Jean-Yves Le Drian (Defensa), Stéphane Le Foll (Agricultura), Marisol Touraine (Salud) o Najat Vallaud-Belkacem (Educación).

"Recrear la unidad"

Manuel Valls tendrá que enfrentar en la campaña a los críticos de la oposición de derecha como a la resistencia de sectores de la izquierda.  

"Mi candidatura es de conciliación, de reconciliación", dijo el lunes al anunciar su decisión. 

"La primaria que se abre es un medio formidable para recrear la unidad", aseguró en un acto en la localidad de Évry, su bastión electoral en las afueras de París. 

Sin embargo, su discurso cercano al empresariado, su estilo autoritario y su visión estricta del concepto de la laicidad, no han sido bien digeridos en su propio campo. 

Muchos de los que apoyan al presidente François Hollande, han expresado que Valls no tendrá su apoyo de manera "automática". 

Si Valls quiere llegar al palacio del Elíseo, deberá superar varios obstáculos. El primer filtro será la primaria de su partido, pero después deberá competir en el mismo espectro político con candidatos como el izquierdista Jean-Luc Mélenchon y el exministro de Economía de Hollande, Emmanuel Macron, un liberal centrista. 

Ninguno de ellos concurrirán a la primaria del PS. 

Manuel Valls se comprometió a combatir a la extrema derecha, que avanza tranquila en los sondeos, cuyo programa "arruinará a los más modestos, a los jubilados, los obreros". 

También lanzó críticas al candidato de la derecha, François Fillon, que según Valls, representa "un retroceso social generalizado". 

Sin embargo, todas las encuestas pronostican que el candidato de la izquierda no pasará de la primera vuelta y que la segunda se disputará entre la representante de la extrema derecha del Frente Nacional, Marine Le Pen, y Fillon.

"Dicen que la izquierda no tiene ninguna oportunidad, pero no hay nada escrito", dijo el lunes Valls. 

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