Ocho muertos tras enfrentamientos entre musulmanes y budistas

El más reciente choque choque entre pescadores budistas y refugiados musulmanes en Indonesia dejó ocho muertos y quince heridos.

Las tensiones étnicas y religiosas en Mianmar se propagaron el viernes a Indonesia cuando pescadores budistas y refugiados musulmanes pelearon con cuchillos y piedras en un centro indonesio de detención de inmigrantes, lo que dejó ocho muertos y 15 heridos. El enfrentamiento ocurrió en la provincia de Sumatra del Norte, donde más de 100 inmigrantes musulmanes del grupo étnico rohingya y 11 budistas de Mianmar acusados de pescar ilegalmente estaban encerrados en el mismo centro, dijo el jefe de la policía local Endro Kiswanto. Según contaron varios testigos a la fuerza pública, los enfrentamientos comenzaron la madrugada del viernes después que un clérigo musulmán y un pescador discutieron sobre la violencia sectaria que estalló el mes pasado en el centro de Mianmar, cuando grupos de budistas armados incendiaron casas y comercios de musulmanes, disturbios en los que murieron decenas de personas y varios miles más huyeron. Los budistas y musulmanes intercambiaron insultos y presuntamente el clérigo fue atacado por los pescadores, dijo Yusuf Umardani, jefe del centro de detención. Cuando el clérigo gritó, sus amigos acudieron en su ayuda. Ello desembocó en una pelea generalizada que los guardas de seguridad no pudieron contener. "La violencia ocurrió tan rápido, y fue completamente inesperada porque hasta ahora habían vivido aquí pacíficamente" , dijo Umardani. "La mayoría de las víctimas sufrieron heridas graves en la cabeza. Al parecer pelearon con todo lo que tenían a su alcance: piedras, madera, sillas y cuchillos" . Ocho budistas perecieron y 15 musulmanes resultaron heridos. Otros tres budistas escaparon ilesos, dijo Kiswanto. "Nuestros amigos estaban cubiertos de sangre" , dijo el pescador Win Thike Oo a un fotógrafo de The Associated Press. "De haber estado nosotros allí en aquel momento, estaríamos igualmente muertos" . Unas 280 personas se encuentran en el centro de detención, más del doble de su capacidad. Hay ahí una mezcla de personas que solicitan asilo de diferentes países, incluyendo Afganistán, Sri Lanka y otros lugares.