Reportero de El País recibe premio de Periodismo Ulrich Wickert
Yefferson Ospina recibió el jueves en Berlín este galardón en la categoría internacional por su crónica Chxa Chxa Wala FC, el fútbol y la guerra en el norte del Cauca.
Yefferson Ospina recibió el jueves en Berlín este galardón en la categoría internacional por su crónica Chxa Chxa Wala FC, el fútbol y la guerra en el norte del Cauca.
Yefferson Ospina, periodista de esta casa editorial, recibió el jueves en Berlín el Premio de Periodismo Ulrich Wickert Stiftung, en la categoría internacional por su crónica Chxa Chxa Wala FC, el fútbol y la guerra en el norte del Cauca.
Este galardón se concede cada año a las mejores crónicas y reportajes sobre los Derechos de la Infancia.
Durante la ceremonia del premio, otorgado por la Fundación Ulrich Wickert, se leyó en el idioma alemán parte de la crónica sobre el fútbol infantil como antídoto contra la guerra en el norte del Cauca.
Durante cinco días, el reportero Yefferson Ospina se adentró en las montañas de Corinto, población del norte del Cauca, para narrar la historia de 230 niños indígenas Nasa que hacen parte de la escuela de fútbol Cxha Cxha Wala F.C., fundada por el cabildo para evitar que sean reclutados por grupos guerrilleros, en especial de las Farc.
Por el premio de periodismo participaron 51 países. El ganador en la categoría especial fue Laahiru Childrens Media Federation, de Sri Lanka.
Yefferson Ospina, nacido hace 27 años en Aguadas, Caldas, fue periodista de orden público y conflicto armado en el diario El País desde 2013. Actualmente, trabaja en la sección de Domingo.
Es egresado de la Universidad del Valle y se ha especializado en temas de violencia urbana.
Ha sido seleccionado en dos ocasiones para participar en proyectos periodísticas de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano Gabriel García Márquez. El texto ganador, precisamente, hizo parte de uno de los proyectos apoyados por dicha entidad.
Yefferson explica en su crónica que en lengua Nasa, Cxha significa fuerza y Wala es grande.
Esta historia es muy conmovedora porque demuestra todo el heroísmo de tantos anónimos que luchan contra la guerra en este país. Uno de los protagonistas, el profe Justiniano Julián, que fue el fundador del club de fútbol, es un tipo un poco tímido que ha vivido toda su vida en medio del conflicto y que no se ha resignado a él. Su lucha ha sido evitar que los niños sean reclutados por grupos armados. Yo creo que personas como el profe Justo hacen muchísimo más por el fin del conflicto en este país que cualquier acuerdo firmado. Como él, hay muchos hombres y mujeres trabajando la paz en el Cauca, y en el país. Esta historia es de algún modo un homenaje a esas personas, dice Yefferson.