Preocupación por secuestros de menores en el Cauca

Dos menores fueron plagiados y otro reclutado a la fuerza por las Farc. Piden su liberación.

La desaparición de dos adolescentes y una niña en el Cauca generó una ola de indignación y rechazo. Dos de ellos fueron secuestrados y el otro es víctima de reclutamiento forzado por parte de un grupo armado ilegal, según han informado las autoridades.Tanto la Defensoría del Pueblo como el Instituto de Bienestar Familiar, ICBF, pidieron la liberación de los menores. “La sociedad caucana deplora estos hechos que atentan contra los menores. Hasta ahora no sabemos nada del paradero de ellos, pero estamos trabajando para apoyar a sus familias”, expresó : James Ney Ruiz Gómez, director del ICBF, Cauca. Los casos ocurrieron en zona rural de Caldono y en Almaguer.El último de los casos se presentó el pasado 24 de noviembre en Caldono, luego de que un estudiante, de 14 años, del colegio Guillermo León Valencia fuera reportado como desaparecido por sus familiares, quienes indicaron además que los presuntos captores los llamaron para exigirles $1.000 millones por su liberación.El menor salía del colegio, ubicado en zona rural de Caldono, hacia su casa en zona rural del vecino Piendamó cuando fue plagiado.El coronel Iván Ramiro Pérez, comandante de la Policía Cauca, indicó que ya se activó un operativo junto al Gaula para dar con el paradero del adolescente. Por su parte, el Director del ICBF aseguró que al parecer se trata de un secuestro cometido por la delincuencia común.En el resguardo indígena Pioyá de la vereda San Juanito, de Caldono, al parecer, las Farc se llevaron a la fuerza a un adolescente, también de 14 años. El menor desapareció el pasado 20 de noviembre cuando se dirigía hacia el Instituto Técnico Agropecuario de PioyáDe acuerdo con Albeiro Calambás, fiscal mayor del Resguardo Indígena de Pioyá, los responsables de esa desaparición serían las Farc, pues en esa zona existen antecedentes sobre reclutamiento ilícito de menores por parte de grupos al margen de la ley.Calambás dijo que el resguardo ha realizado varias mingas por la zona urbana y rural del municipio sin obtener ninguna noticia sobre su paradero y agregó que exigen “que se entregue al menor sano y salvo lo más pronto posible, y si dilatan más la liberación nos declararemos en asamblea permanente”.El ICBF asegura que este año en el Cauca cinco menores de edad han sido reclutados por las Farc y recuperados o devueltos, con la intermediación de la Defensoría u organismos internacionales, a sus comunidades.En el otro caso, ocurrido en Almaguer, Cauca, Luisa Fernanda, de 8 años, fue secuestrada cuando se encontraba en el parque principal de la población. Dos hombres la abordaron y se la llevaron en una motocicleta hacia un paraje de la vía que comunica con el municipio de La Vega.“La menor estaba con su abuela el día de ayer. Según informó su madre, la niña le dijo a su abuela que se iba a casa de la madre y en ese trayecto desapareció. Hasta el momento no tenemos información sobre quién estaría detrás del hecho”, dijo el coronel Pérez..Ante estos hechos, la Defensoría del Pueblo pidió a las autoridades “agilizar las investigaciones para determinar si efectivamente los tres casos coinciden con la modalidad de secuestro, cuáles fueron las circunstancias que rodearon la desaparición de los menores, pero particularmente articular un plan metodológico para establecer su paradero y propiciar el pronto regreso a sus hogares asegurando las medidas de protección necesarias para salvaguardar su vida e integridad”.El caso de AlejandraAlejandra Cantoñí, de 11 años, fue secuestrada por las Farc en Guachené, Cauca, en mayo pasado. La menor, hija del comandante de la Estación de Policía de Padilla. Alejandra fue liberada horas después del plagio por la presión de la Guardía Indígena que empezó su búsqueda en la zona montañosa del norte del Cauca. La menor había sido llevada hasta Toribío y allí dejada libre.Este caso, reconocido por las Farc, generó una ola de rechazo en todo el país y una movilización de los habitantes de Guachené y de los indígenas del norte del Cauca. El plagio fue atribuido a miembros del Frente 6 de las Farc.