La colombiana transgénero atrapada en Hong Kong ya está en Nueva Zelanda

Eliana Rubashkyn logró salir de Hong Kong y llegar a Nueva Zelanda, donde tiene estatus de refugiada.

Luego de casi nueve meses de encierro en Hong Kong, donde estuvo retenida sin pasaporte, la colombiana transgénero Eliana Rubashkyn pudo trasladarse a Nueva Zelanda, donde ahora tiene estatus de refugiada. El calvario de esta joven bogotana inició en septiembre del año pasado, cuando las autoridades de Hong Kong le quitaron su pasaporte porque su imagen, la de una mujer de 25 años, no correspondía a la fotografía del documento.Eliana llegó a esta ciudad desde Taiwán, donde realizaba estudios de maestría en Administración Pública en Salud y, al tiempo, se había sometido a un tratamiento de cambio de sexo. Fue este cambio en su identidad el que la obligó a viajar a Hong Kong, pues las autoridades taiwanesas le pidieron actualizar la fotografía de su pasaporte para así poder renovarle la visa de estudiante.Pero por este simple trámite la joven se vio sometida a la pérdida de sus documentos en Hong Kong, así como a un abuso sexual y problemas en su salud, pues debía seguir un estricto régimen de medicamentos a los cuales ya no podía acceder.Al no tener pasaporte ni documentos para establecerse en Hong Kong, Eliana se enfrentaba a una deportación a Colombia, país del que huyó por la discriminación que vivió por su condición sexual, que la hizo víctima de un ataque con arma blanca. Sin embargo, logró conseguir un estatus de refugiada ante Naciones Unidas, que la obligaba a quedarse en Hong Kong sin poder trabajar, estudiar o, incluso, movilizarse libremente. A comienzos de junio, casi nueve meses después, Eliana pudo salir de esta ciudad y establecerse en Nueva Zelanda, donde sí aceptan a los refugiados y les brindan protección. "Gracias a la vida por esta nueva oportunidad, por este nuevo comienzo. Gracias al destino por permitirme seguir al ritmo de mi corazón este sueño", escribió la joven en su blog.Agregó que, aunque no ha sido fácil, en este lugar ha sentido una calurosa bienvenida y que agradece "ser reconocida como mujer desde que llegué, aquí hay un acto de humanidad que nunca había experimentado y es como si hubiera alcanzado la mayor meta en mi vida, algo que había soñado desde los 6 años". Eliana cuenta que ha compartido con refugiados de Afganistán, Myanmar, Irán, Somalia y Colombia, y que se ha dado cuenta de que las "injusticias sociales forzan a la gente a dejar sus tierras, sus familias, sus seres queridos y sus pasados para encontrar paz y esperanza". "Es bueno ver cómo Nueva Zelanda protege, ayuda y respeta a los refugiados, algo que Hong Kong no hace. Ahora siento que estoy en una democracia completa, un sitio en el que mi género, identidad, religión, etnia, nacionalidad y antecedentes no importan, porque por encima de todas esas etiquetas soy un ser humano", escribió Eliana.Ahora, afirma, espera poder conseguir su título como Farmacista registrada, para así poder ejercer su profesión en este país.