Farc proponen desmilitarizar zonas de sustitución de cultivos ilícitos

El plan presentado por las Farc para el tema de las drogas ilícitas comprende también la veeduría internacional y el reconocimiento medicinal y terapéutico de los cultivos.

La delegación de las Farc para el proceso de paz presentó en La Habana una nueva propuesta para el tema de drogas ilícitas, en la que se habla de desmilitarización de algunas zonas y la suspensión de la fumigación de los cultivos ilícitos.El plan, llamado 'Programa nacional de sustitución de los usos ilícitos de los cultivos de hoja de coca, amapola o marihuana', está basado en una propuesta de Manuel Marulanda dirigida a Cartagena del Chairá, la cual fue presentada en San Vicente del Caguán en el año 2000.La propuesta de las Farc comprende "transformaciones estructurales de la sociedad rural" y el fortalecimiento de "las comunidades campesinas y su gestión autónoma sobre el territorio", así como la sustitución voluntaria de cultivos ilícitos "mediante el impulso de planes de desarrollo alternativo", en los que se reconozcan "las cualidades alimenticias, medicinales, terapéuticas y culturales de estos cultivos". El grupo subversivo también pide la suspensión de "explotaciones mineras o de hidrocarburos que en los territorios objetos de esta iniciativa puedan afectarla" y la creación de un "consejo nacional encargado de diagnosticar, formular e implementar el programa". Reclaman la desmilitarización al asegurar que se requieren "garantías y condiciones de seguridad para la población campesina, así como la suspensión de las aspersiones aéreas y de la erradicación forzada de cultivos". Las Farc también piden que se revise la política del Estado sobre los campesinos productores, de la cual dicen que actualmente está" centrada en la persecución, la estigmatización y la criminalización" de los mismos. Para el cumplimiento de estas propuestas, la guerrilla propone la creación de una veeduría internacional, con la participación de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, la Unasur y la comunidad académica.