Con fusiles intentaron asaltar carro de valores en el Cauca

Una persona que resultó herida es atendida en un centro asistencial de la ciudad de Popayán.

En la unidad de cuidados intensivos de la clínica Santa Gracia de Popayán, permanece bajo estricta observación médica Diego Armando Rodríguez, uno de los guardas de seguridad que resultó herido tras el ataque a un carro de valores a escasos 15 kilómetros de Popayán. La vereda El Túnel sobre la carretera Panamericana, en el municipio de Cajibío, sobre la vía que comunica a Popayán y Cali, fue el escenario de un ataque con armamento de largo alcance contra un carro de la empresa Transportadora de Valores del Sur y que llevaba el recaudo de dos estaciones de gasolina y del Peaje de Tunía. El hecho ocurrió hacia las 11:00 de la mañana cuando el vehículo, en cuyo interior viajaban tres guardas, llevaba el dinero hasta la capital del Cauca. De acuerdo con la versión que manejan las autoridades, varios disparos desde la zona montañosa aledaña a la carretera se hicieron en contra del vehículo. Algunos de los proyectiles alcanzaron a atravesar el blindaje del automotor y uno terminó impactando en la cabeza al guarda Diego Armando Rodríguez. Los testimonios de los trabajadores de la empresa al personal médico de la clínica Santa Gracia, en donde fue atendido el herido, señalan que a pesar del ataque, el conductor no disminuyó la velocidad y por el contrario siguió manejando hasta llegar al centro médico en donde a esta hora es atendido. Diego Armando Rodríguez recibió un disparo en su frente y aunque fue internado con un diagnóstico grave, permanece en condición estable mientras esperan su evolución para proceder a disminuir la lesión en su cerebro. Aún el pronóstico es reservado, según se indicó. Falló el blindajePor el momento se han recopilado todos los detalles necesarios para establecer quien podría estar detrás del asalto y como consiguieron datos de las rutas y horarios de tránsito. Aunque no se ha dado a conocer el monto transportado en el interior del vehículo, versiones extraoficiales señalan que los guardas custodiaban 140 millones de pesos, que finalmente llegaron a su destino en Popayán. Aún las autoridades no han revelado mayores detalles de la investigación en la zona en donde ocurrió el ataque y en donde han hecho presencia de manera histórica grupos armados ilegales. Emerson Solarte, experto en seguridad y asesor de una empresa de vigilancia y protección en la capital caucana, señaló que para realizar este asalto y para contar con la posibilidad de vulnerar un blindaje de un carro de valores, debe haberse utilizado armamento de alto calibre. “Debe ser un fusil con calibre 7.62 o 5.56 milímetros, porque estos vehículos normalmente tienen un blindaje 10 que protege contra armamento como pistolas automáticas y escopetas o incluso explosivos de mediano poder”, señaló Solarte. Este tipo de calibre es utilizado en fusiles AK-47 o Galil como los que han sido incautados cuando se realizan operaciones contra la guerrilla, sin embargo, también la delincuencia organizada e incluso las mismas Bacrim tienen acceso a este armamento, según se señaló.