Así va la ofensiva contra el Clan Úsuga
Policía asegura que la banda criminal está cercada por lo que desplegó un Plan Pistola. 1200 uniformados tras alias Otoniel, jefe de esta organización.
Policía asegura que la banda criminal está cercada por lo que desplegó un Plan Pistola. 1200 uniformados tras alias Otoniel, jefe de esta organización.
Las autoridades anunciaron la intensificación de la lucha conta el clan Úsuga, la banda criminal más grande de Colombia con presencia en 17 departamentos, y contra su jefe el exguerrillero y exparamilitar Dairo Antonio Úsuga, el criminal más buscado del país. Lea también: Los tentáculos del 'Clan Úsuga' en Colombia
El lunes pasado el presidente Juan Manuel Santos aumentó la recompensa por información que lleve a la captura de este hombre a $3000 millones y anunció una serie de medidas en la lucha contra las bacrim.
Una semana antes, el Jefe de Estado había felicitado a la Fuerza Pública, por la captura de alias Negro Andrés, cabecilla del Clan Úsuga en los Llanos Orientales, que era un objetivo de alto valor para el Gobierno, pues hacía parte del plan de la estructura criminal para atentar contra miembros de la Policía, poniéndoles precio a sus cabezas.
Es que desde el año pasado las autoridades realizan la operación Agamenón contra el Clan Úsuga, en la que han capturado a 575 miembros de esta banda y otros 200 de grupos afines a esta.
El plan comenzó a ejecutarse el 2 de febrero de 2015, con 1200 policías que buscaron atacar los santuarios y rutas de la estructura en el Urabá.
Entre los miembros de este grupo dados de baja se encuentran El Negro Zarley, que era el segundo al mando de los Úsuga, así como alias Guagua, delegado para penetrar en el Pacífico. También han sido arrestados su esposa y su hermana, entre otros familiares.
Para Ariel Ávila, de la Fundación Paz y Reconciliación, uno de los éxitos de Agamenón han sido los resultados operativos, en términos de incrementos en capturas e incautaciones. Sin embargo, la influencia de este grupo se vio en el paro decretado el mes pasado, que afectó Córdoba y Antioquia, especialmente.
El Plan PistolaInteligencia policial interceptó una comunicación entre el Negro Andrés en la que ordena a alias Monar, otro cabecilla del Meta, atacar patrullas que se muevan entre las vías de Vista Hermosa y Mesetas.
La Dijín determinó que el Plan Pistola fue ordenado por alias Otoniel; Roberto Vargas, Gavilán, y Aristides Mesa, El Indio.
Según la investigación, estos tres sujetos ordenaron a cabecillas regionales asesinar a miembros de comandos especiales de la Policía y atentar contra sus familias, en retaliación por los operativos en su contra. A través de abogados al servicio del Clan han identificado a miembros del Bloque de Búsqueda, primero para intentar sobornar y evitar las capturas, o para atentar contra ellos y sus familias.
Investigadores de la Dijín estableciero que los tres cabecillas ordenaron que desde el Urabá se diera una lista de precios, según la cual pagarían por un homicidio de un comando jungla $20 millones; de agentes de la Sijín o de la Dijín, de $5 a $10 millones, dependiendo del rango, y de policías uniformados, $3 millones.
Con las capturas a testaferros, las incautaciones y el control en vías del Urabá en las que antes transitaban con tranquilidad, se han sentido asfixiados y planearon el Plan Pistola para desviar nuestra atención. Ninguno de los cabecillas del Clan Úsuga duerme tranquilo, porque saben que estamos cerca de ellos y constantemente realizamos operativos para dar con sus capturas, dijo uno de los miembros del Bloque de Búsqueda.
Combates con la guerrilla La Defensoría del Pueblo denunció la violenta incursión protagonizada por los grupos armados ilegales en el corregimiento Puerto López de El Bagre, Antioquia, donde tres civiles resultaron heridos ante el cruce de fuego indiscriminado entre miembros de la guerrilla y las llamadas bandas criminales. Los combates fueron entre las autodenominadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia (el mismo Clan Úsuga) y fuerzas conjuntas del las Farc y el ELN.