‘El Artista’ ya está en las carteleras colombianas

’El artista’, un emocionante homenaje a un paso trascendental de la cinematografía, fue rodada en blanco y negro, en un 95% muda y con subtítulos, y con el carácter de imagen recortada y fragmentada que fue común en la fílmica de los años 20.

De un momento a otro, los aplausos, los autógrafos, las admiradoras y la gloria desaparecen de la vida de George Valentin (Jean Dujardin). En cuestión de meses pasará de ser un astro del celuloide a una pieza olvidada de una época lejana.Una actriz novata que él justamente eligió para encauzarla al estrellato, declara a los medios que el cine mudo es cosa de “la prehistoria”. Que sus ídolos ahora son reliquias de otrora. Que la magia del cine acompañado por maravillosas Orquestas Sinfónicas, en definitiva está muerto.Al gallardo y digno Valentin se le acaba el mundo. Por nada ni nadie se doblegará ante la nueva tecnología que ha llegado para denigrar justo lo que ha sido su maestría: la gesticulación.Parece que todo será contrario a lo que hasta entonces ha sido ‘El artista’. Sus esperanzas se pierden en el vacío de las salas donde se proyectan las últimas películas sin habla. Así comienza la ingeniosa cinta francesa que tiene al mundo del cine pleno de fascinación y admiración. ’El artista’, un emocionante homenaje a un paso trascendental de la cinematografía, fue rodada en blanco y negro, en un 95% muda y con subtítulos, y con el carácter de imagen recortada y fragmentada que fue común en la fílmica de los años 20.Y así fue la historia real. Tan sólo tres años duró la batalla del cine sonoro contra el cine mudo. Aunque desde los mismos albores del cine se había pretendido darle sonido a las imágenes del cinematógrafo, el gran reto para los investigadores fue la sincronización del audio con los movimientos. Lograda esta sincronía, en particular por el ingeniero estadounidense Lee de Forest, el cine pudo hablar y definitivamente dejó atrás a la época silente, a partir de ‘El cantor de jazz’, en 1927. Para 1930, las películas mudas eran parte del pasado.Nombres de tal rutilancia como John Gilbert y Buster Keaton (quienes quedaron relegados entonces), parecen ser el motivo de inspiración para el personaje de George Valentin en ‘El artista’ (interpretado por el francés Jean Dujardin); si bien la apostura, enigmática mirada y sensualidad de Valentin, recuerdan el mito indeleble del italiano Rodolfo Valentino. Sin embargo, en el boletín oficial del filme se dice que el personaje está basado en Douglas Fairbanks.Dujardin, al igual que los productores y demás miembros del equipo de esta comedia bizarra, ingeniosa e irreverente, aún no salen de su asombro por el éxito. Quizá ‘El artista’ no gane el Oscar a mejor película; podría no ganar ninguno de los premios a los que está nominada, pero es obvio que ya sobrepasó todas las expectativas al consolidar este homenaje sensitivo y casi surrealista, al gran paso del cine mudo al sonoro. “Pensamos que era una película muy europea. Lo sorprendente es constatar que la nostalgia por los albores del cinematógrafo sigue vigente en el mundo”, apunta el actor, apenas reconocido como comediante en su país.A sus 39 años, convertido de repente en estrella mundial, Dujardin parece ser el mismo tipo sencillo que hasta hace poco nadie conocía fuera de Francia. “He recibido propuestas de Hollywood y otros países, pero yo vivo feliz en mi país. No es falsa modestia decir que no necesito más”, dice el actor.En cuanto al director y escritor de ‘El artista’, Michel Hazanavicius, a sus 44 años ha tocado el firmamento de los triunfadores, que le había sido esquivo desde su debut en 1999 con la película ‘Mis amigos’.La invención del espía francés Hubert Bonisseur le significó a Hazanavicius un relativo éxito en Francia con dos filmes: ‘OSS 117: El Cairo, nido de espías’ (2006) y ‘OSS 117: Perdido en Río’ (2009). Todo pudo suponer, la noche que se puso a imaginar una película muda, al lado de su esposa, la actriz Bérénice Bejo (coprotagonista del filme y nominada al Oscar como actriz secundaria), que su nombre pasaría a codearse con grandes del cine mundial. “Desde niño soñé con hacer una película muda, amaba a Lang, Ford, Lubitsch, Murnau y otros creadores del cine mudo. Considero que es un cine más sensorial y que le adjudica mayor responsabilidad al director. Mi punto de partida era el de un gran actor de cine silente que no quería saber nada del cine sonoro”, apunta Hazanavicius.El resultado no podía haber sido más halagüeño para todos. Es evidente que el lenguaje audiovisual podría no llegar a ser digerido por el público masivo, tornándose pesado y monótono en la primera media hora de proyección. Pero para los amantes del cine arte, ‘El artista’ ya se convirtió en un hito del cine contemporáneo y pasará a la historia como una de esas cintas exquisitas que tocan la sensibilidad de los amantes del Séptimo Arte.