Museo de cine de Caliwood, dos años por la recuperación de la memoria

El museo del cine de Cali cumple su segundo aniversario. Hablamos con su fundador, Hugo Suárez, entre otras cosas de una polémica: haber patentado ‘Caliwood’ como nombre del museo.

El museo del cine de Cali surgió en un taller de reparación de carros: ServiDacar. Un día cualquiera, hace una década, Hugo Suárez Fiat se encontraba ahí, restaurando un clásico. De pronto vio unos proyectores de cine abandonados, que según le informaron, habían sido utilizados en el Teatro Jorge Isaacs. En el acto, el cerebro de Suárez, un abogado que en realidad hubiera preferido ser ingeniero, empezó a funcionar a mil por hora: ¿cómo consigo el dinero para comprarlos?, se preguntaba. Aquel día, sin sospecharlo, Suárez restauró el auto clásico pero empezó también a restaurar la memoria cinematográfica. Este 1 de noviembre Caliwood, el museo del cine que decidió crear, cumple dos años de fundación. Usted fue uno de los gestores del Museo del Transporte de Cali y ahora del Museo del Cine. ¿Por qué son importantes los museos para una ciudad?Los museos son muy importantes para las ciudades, pues una vez se consolidan, se convierten en referentes académicos, didácticos, lúdicos, recreativos y turísticos y lo más importante, en forma gradual, como es el caso de Caliwood, se transforman en los depositarios legítimos del testimonio histórico y material dejado por el hombre o por la naturaleza. Caliwood es un museo de carácter tecnológico y con vocación interactiva, que tiene como objetivo completar su colección permanente mediante la inclusión del mayor número posible de linternas mágicas, daguerrotipos, zootropos, perfecscopios, cámaras, cinematógrafos, proyectores de cine de teatros públicos,  filmadoras, etc, que fueron fabricados antes de 1970 y con antelación a la explosión digital.¿Por qué Cali necesita específicamente un museo del cine?Para proteger el patrimonio tecnológico - fotográfico y cinematográfico – usado en el pasado en el país; para que las futuras generaciones puedan ver, analizar y comprender la evolución de la fotografía y cómo el hombre fundamentó en ella los inventos que dieron lugar a la cinematografía. ¿Cómo logró patentar ‘Caliwood’ como nombre del museo?Al regresar de un viaje a Estados Unidos, en octubre de 2008, en compañía de mi esposa Gloria Escobar Lozano, solidaria incondicional con estas iniciativas, le mencioné que pensaba bautizar el museo del cine con el nombre ‘Caliwood’.  Ella sonrió y dijo que yo sí que era optimista, que esa marca estaba en el ambiente desde hacía más de 40 años. Acudí a la firma de Abogados de Sergio Cabrera y me di cuenta que la marca ‘Caliwood’ no tenía propietario, a pesar que parecía haber sido incubada desde 1968. Procedí a patentarla, a un alto costo, en Colombia y en el exterior.¿Eso generó polémica entre los protagonistas del movimiento cinematográfico que se llamó ‘Caliwood’?He conocido que uno de los protagonistas del movimiento ha ofrecido declaraciones a los medios, en los cuales nos califica de usurpadores de la marca. Los hechos prueban que no es cierto. La palabra ‘Caliwood’ no tiene progenitor conocido. Nadie puede reclamar derecho sobre la palabra ‘Caliwood’, si durante más de 40 años tuvo la oportunidad de registrarla y no lo hizo.Este tema me recuerda el triciclo abandonado en el patio de una casa. No es sino que aparezca alguien interesado en embellecerlo para que le aparezcan varios dueños beligerantes. Yo continuaré engrandeciendo el Museo para que la palabra ‘Caliwood’ brille y trascienda.Este 1 de noviembre Caliwood cumple su segundo aniversario. ¿Cómo mantener vigente un museo?Al cumplir el segundo aniversario terminaremos el teatro del museo. Vamos a organizar la Premier de ‘Petecuy, la película’, el largometraje del director caleño Óscar Hincapié. Será un acontecimiento del que nos vamos a sentir muy orgullosos. Desde que abrimos las puertas al público en noviembre de 2012, el museo se ha empecinado en generar hechos, eventos y adquisiciones que le permitan estar presentes en la mente de todos. Uno de los medios más valiosos que tiene el museo para mantenerse vigente es la página web que creó para ‘Caliwood’ mi amigo Alberto Silva Borrero, la cual se está convirtiendo en un referente.En estos dos años, ¿cuáles han sido las principales dificultades?La incapacidad económica. No obstante estoy seguro de que cuando la mayoría de la comunidad caleña visite el museo, se conseguirá el punto de equilibrio. ¿Y las satisfacciones, los días felices?Muchísimas. Son meses enteros durante los cuales se ha podido armar la colección del museo, la que algunos expertos calificados tildan de carismática, expresiva, ortodoxa y alucinante.