La nueva literatura erótica, el más reciente 'boom' de las letras
La lista es más grande, con títulos más sugestivos como 80 melodías de pasión de Vina Jackson o 23 penumbras del deseo, de varias autoras.
La lista es más grande, con títulos más sugestivos como 80 melodías de pasión de Vina Jackson o 23 penumbras del deseo, de varias autoras.
Antes de Cincuenta sombras de Grey existía la literatura erótica, por supuesto. Solo que con el libro de la británica E.L. James fue como si mucha gente (no necesariamente lectora) se contagiara de curiosidad, y sumándole el mercadeo, causaran todo un boom, incluso, una reactivación del género.Antes había una literatura erótica que leía cierta gente, que se movía, pero no tanto, dice la librera Gloria Melo.La editorial Tusquets tiene una colección especializada desde 1977, La sonrisa vertical, en la cual se han publicado relatos como El elogio de la madrastra de Mario Vargas Llosa, Opus Pistorum de Henry Miller y Las edades de Lulú de Almudena Grandes. Tres títulos, entre 150 que ya tiene la colección.El cineasta Luis García Berlanga, uno de los creadores de La sonrisa vertical, decía que quería, a través de sus libros, constatar que el escribir sobre lo biológicamente apetecible es algo inmanente a todos los tiempos, a todas las geografías, a todos los hombres.Tal vez, eso biológicamente apetecible es lo que llevó a muchos a leer Cincuenta sombras e ir convenciendo a los amigos de leerlo, hasta convertirlo en el más vendido, cosa que no esperaba ni su autora. La verdad es que yo misma estoy muy sorprendida con la que se ha montado, suele confesar James. Nunca me propuse hacer un best seller. Lo que yo quería era escribir una novela que divirtiera a las mujeres. Y parece que ese ha sido el caso. Aunque Cincuenta sombras ha divertido también a los hombres, además divierte a las editoriales. Después de su éxito han salido muchísimos libros eróticos más, cuenta Gloria Melo. Ahora están en la lista de los más vendidos. Es más, 50 no se ha ido de los diez primeros en la lista de la Librería Nacional.Random House, que publicó Cincuenta sombras, trae títulos como El diario de la sumisa de Sophy Morgan o La ciencia y el sexo de Pere Estupiyá. Planeta propone Pídeme lo que quieras de Megan Maxwell e Indiscreción de Charles Dubow. Suma de Letras publicó El affaire Blackstone, que ha conquistado al público.Aunque ahora la expectativa esté en el estreno en el cine de las Cincuenta sombras, el 1 de agosto de 2014.La lista es más grande, con títulos más sugestivos como 80 melodías de pasión de Vina Jackson o 23 penumbras del deseo, de varias autoras. La propuesta sobrepasa la ficción. Hay muchos con información para experimentar.No obstante, queda la tarea de los clásicos. Mi madre de Georges Bataille, por ejemplo, El amante de Lady Chatterley de David Lawrence o, si se atreve, los del Marqués de Sade.El género creció. Ya no es un problema o un tabú hablar de sexo o mencionar que se leen libros de sexo. Creo que esto lo que hizo fue desatar un poco la emoción de la gente de poder hablar de forma más tranquila, explica Ángela María López, de Random House.En la página de la editorial Tusquets, todavía se lee: Publicamos novelas y relatos que se sitúen dentro de un género, el erótico, que no siempre goza de la atención y de la admiración que merece.Quizá habría que preguntarse por la calidad y los cambios. Esas novelas eróticas de antes y esas novelas eróticas de ahora. Vargas Llosa habla sobre el erotismo. No es el mismo, dice.