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La vocación literaria del Élmer Mendoza irrumpió a los 28 años, pues pasó una noche en vela escribiendo historias. | Foto: Colprensa

LITERATURA

Este jueves inicia la Feria Internacional del Libro de Cali

El escritor mexicano Élmer Mendoza, ícono de la novela policial, abre a las 3:15 p.m. la Feria del Libro de Cali.

10 de octubre de 2017 Por: Redacción de El País 

Mañana se abrirán las puertas de la Feria Internacional del Libro de Cali, fiesta de las letras que se desarrollará en el Bulevar del Río hasta el domingo 22 de octubre, de 10:00 a.m. a 8:00 p.m., y que contará con entrada gratuita para los visitantes.

El invitado en la primera jornada será Élmer Mendoza, definido por el escritor Arturo Pérez-Reverte como “El patriarca de la literatura policial en México”.

Élmer dialogará con la periodista y escritora Paola Guevara en una entrevista abierta al público, a las 3:15 p.m., en el Auditorio El País, ubicado en el Bulevar del Río.

‘Besar al detective’ y ‘El misterio de la orquídea calavera’ son dos de las novelas más importantes del escritor mexicano de 67 años, que ha sido traducido a 10 idiomas y cuyas obras han llegado a todos los países de habla hispana.

Nacido en Culiacán, México, en 1949, es miembro de la Academia Mexicana de la Lengua y ha ganado el Premio Nacional de Literatura José Fuentes Mares (con ‘El amante de Janis Joplin’) y el Premio Tuquets de Novela (con ‘Balas de plata’).

Cuando Élmer estaba finalizando su novela ‘¿Besar al detective?’ tuvo una experiencia cercana a la muerte: sufrió un infarto y eso, sospecha, modificó el resultado final de la obra.

Padre de la ‘narcoliteratura’

En el estado de Sinaloa, el corazón agrícola de México, donde nació Élmer, sus abuelos le enseñaron primero las actividades usuales del campo. Élmer era un campesino que además de trabajar la tierra iba al cine a ver películas de Pedro Infante, escuchaba corridos y veía la violencia: puñales, pistolas y escopetas eran habituales entre los agricultores. Los usaban para cazar animales, sobre todo, pero también para matarse entre ellos.

Como no había ley, o cuando llegaba era muy tarde, algunos hacían justicia por su mano. Su abuelo le contaba que solo a quienes mataban a alguien les componían un corrido. El mero macho, el que lleva el miedo en los talones, ese era el respetado en Sinaloa.

Ese primer contacto con la violencia fue también su primer acercamiento con las temáticas de las que, muchos años después, serían sus historias. Por todo esto, Élmer Mendoza es considerado el creador de un subgénero literario: la narcoliteratura, elevada narrativamente por la asombrosa capacidad de su pluma y su imaginación.

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