El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Cultura

Artículo

Así habla de Cali Clara María Ochoa, la dama del cine colombiano

Esta productora caleña se ha convertido en sinónimo de éxito para el cine y la televisión colombiana. Ella, junto a Carlos Moreno, César Acevedo y Luis Ospina, pusieron a sonar a Cali en el mundo de la cinematografía.

26 de diciembre de 2015 Por: Claudia Liliana Bedoya S., reportera de El País

Esta productora caleña se ha convertido en sinónimo de éxito para el cine y la televisión colombiana. Ella, junto a Carlos Moreno, César Acevedo y Luis Ospina, pusieron a sonar a Cali en el mundo de la cinematografía.

Con mucho orgullo, Clara María Ochoa Domínguez reconoce que todo lo que ha logrado en su vida se debe a una sola razón: haber nacido, crecido y vivido en Cali.

Su nombre se ha convertido en sinónimo de éxito en el cine y en la televisión nacional. Y este 2015 brilló con luz propia cuando su compañía CMO Producciones con la serie ‘La ronca de oro’ logró cinco Premios India Catalina. La producción además ha llegado a las pantallas de 23 países y ya habla varios idiomas como árabe, ruso, chino y tailandés. 

Terminó el 2015 con el lanzamiento de la película  ‘Siempreviva’ sin dejar de trabajar en otros proyectos cinematográficos y en la escritura de nuevas series para TV. Así habla Clara María Ochoa Domínguez, una caleña de la que se habla bien y que ama hablar bien de Cali: 

¿Cuando escucha la palabra 'Cali', qué pasa por su cabeza?

Cali me evoca el olor a cadmia, arte, salsa, pujanza, la ciudad de Colombia en donde las mujeres son sobresalientes. No sé qué tenemos las mujeres de Cali, pero nos hemos distinguido por salir adelante en sectores como la cultura, la economía, la política y el deporte.

Si tuviéramos que adjudicarle un sinónimo a Cali, ¿Cuál sería?

El de resistencia porque ha sido una ciudad  golpeada por el narcotráfico y las malas administraciones. Tuvimos una época donde la cultura del narcotráfico estaba llevando la pauta, no fue una buen época para Cali. Además, ha sido manejada por mandatarios que han apostado por satisfacer sus necesidades personales y no las de la ciudad. Este es un momento importante para Cali,  los próximos serán años vitales para recuperar su desarrollo.

Haber nacido, crecido y vivido en Cali, ¿Qué tanto ha influido en su trabajo?

Todo. Me siento muy orgullosa de ser caleña, de nacer y haberme criado en una familia como en la que crecí, eso ha representado el valor y la fuerza para salir adelante y llegar a donde la vida me ha llevado. Si  no fuera caleña, sería otro cantar. Cali me retó a ser la empresaria que he llegado a ser.

Su trabajo sabe a Cali...

Sí, tiene todo el sabor. Ahí están la pasión, la dedicación y la tenacidad que aprendí en Cali de mis padres, de mis abuelos y de mi familia.

¿Por qué Cali es una tierra de gente exitosa?

Yo no sé qué es lo que nos dan a nosotros en Cali que nacemos como con una marca para ser sobresalientes. En Cali, por ejemplo, las mujeres no son perezosas, la mayoría han logrado lo que se proponen. Tal vez es porque la mujer caleña tiene personalidad, dedicación, inteligencia, resistencia, fuerza, empeño, y creatividad.

Desde Bogotá, ¿cómo cultiva su amor por Cali?

Con todos los proyectos que producimos en CMO. La serie de TV ‘La Ronca de Oro’ por ejemplo, fue una de las producciones que sacamos adelante en el Valle del Cauca y en Cali, con la que hicimos que se conociera en Colombia y el mundo la vida y obra de Helena Vargas, ejemplo de una mujer netamente caleña en el más amplio sentido de la palabra. Además, gran parte del grupo de trabajo en nuestras producciones curiosamente es caleño, tiene un talento y capacidad creativa inigualable, además nos la gozamos.

Dice que Cali está en un momento en el que ha vuelto a brillar. Desde su perspectiva ¿qué deberíamos hacer los caleños que estamos en esta ciudad y los que están fuera para aportar en ese propósito?

Recuerdo que cuando trabajaba en Cali teníamos el llamado Grupo 80, éramos empresarios de todas las áreas que nos uníamos para trabajar en pro de la ciudad y la región. En ese sentido creo que los caleños que estamos por fuera, que podemos y tenemos poder de convocatoria, deberíamos agruparnos para ayudar a las nuevas generaciones de cada una de nuestras industrias transmitiéndoles conocimiento y apoyo empresarial. Y quienes están en Cali deben pensar más en comunidad y no individualmente. Hay mucha gente allá con la capacidad de aportar conocimiento. Hay que proponer frentes claros y empezar a trabajar. 

"Hay que amar a Cali porque nos dió lo que somos, y por Cali es que somos lo que somos. Tengo un agradecimiento muy grande con esa tierra tan maravillosa”, Clara María Ochoa Domínguez, productora.

¿Podría definir a Cali en un frase?

Cali es raíces, herencia y pujanza. 

¿Qué no se ha dicho de Cali y que la gente debe saber?

Cali es la meca del cine, en ella han nacido y se han desarrollado los grandes nombres del cine. Esto del cine lo llevamos en la piel, en la sangre. Es la ciudad insigne de la cinematografía, por algo Cali es Caliwood.

¿Es Cali el paraíso terrenal?

Lo fue, y estoy segura será de nuevo el paraíso terrenal.

Los otros nombres caleños de la cinematografía 

Un nombre revelación 

César Augusto Acevedo hace parte de la nueva generación de realizadores caleños. Su ópera prima ‘La tierra y la sombra’ recibió tres premios en el Festival de Cine de Cannes: en la Semana de la Crítica 2015,  el SACD, que otorga la Sociedad de Autores y Compositores, el France 4 Visionary Award (Premio Director Revelación) y Le Grand Rail D’Or (Premio del público).

Reinterpretando a Andrés Caicedo

La película ‘Que viva la música’, dirigida por Carlos Moreno  empezó el 2015 con pie derecho: fue estrenada en el Festival de Sundace y meses después premiada como mejor coproducción en el Festival de Cine Latinoamericano de Sao Paulo 2015. 

En octubre llegó a las pantallas colombianas presentando una reinterpretación del texto escrito por Andrés Caicedo. La película se convirtió en la excusa para leer a un autor caleño.

Cine sin fronteras

Luis Ospina es el hombre del cine en Cali. Este año brilló porque el Festival Internacional de Cine de Cali llegó a su versión número 7 con presencia de 16 países. Además, el realizador caleño ganó el estímulo del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico -FDC- con su película ‘Todo comenzó por el fin’, que habla en retrospectiva de la historia del cine colombiano. La película pasó por festivales de Japón, Morelia (Michoacán, México) y sigue de circuito por los festivales del mundo.

AHORA EN Cultura