"Vigilancia a las cajas se reforzó durante el 2015": Supersubsidio

La Supersubsidio, Griselda Janeth Restrepo, dice que se han visitado 34 de las 43 que operan en el país. El sistema saltó de 6 millones a 8,4 millones de afiliados.

Las cajas de compensación familiar son hoy un soporte social y económico para los trabajadores, pero algunas han incurrido en el manejo irregular de sus recursos.

Frente a ello, la Superintendencia del Subsidio Familiar ha reforzado esa vigilancia este año para proteger casi $5 billones en recursos parafiscales en beneficio de 19 millones de colombianos.

La superintendente Griselda  Janeth Restrepo Gallego afirma que gracias a esas tareas reforzadas por el Gobierno se han visitado 34 de las 43 cajas de compensación.  

¿Cómo cierra la Supersubsidio el 2015 en materia de programas, vigilancia y controles?

Fue positivo para la Superintendencia, en especial durante este periodo presidencial. Recibimos una  entidad débil con 62 funcionarios, cinco cajas con grandes dificultades, que hoy están intervenidas, e inconvenientes para vigilar 43 cajas que le manejan a Colombia recursos por $4,8 billones de la parafiscalidad.

Frente a tales circunstancias, el presidente Santos reforzó la Superintendencia con más equipos técnicos. Yo llegué hace un año, y gracias a esos apoyos hemos mejorado la vigilancia, haciendo énfasis sobre todo en hacer más visible a la institución porque tiene impacto en 19 millones de personas beneficiarias de ellos 8 millones 400 mil afiliados al sistema. Eso significa que la mitad de los colombianos están afiliados a un sistema de compensación, que no solo ofrece subsidios sino servicios de educación, vivienda, salud, recreación y otros componentes sociales como planes de empleo.

¿Qué ha pasado con esas cajas a las cuales se les detectaron anomalías en su manejo?

Cuando llegamos había cajas que hace cinco años no eran vigiladas. Y gracias a los refuerzos en materia de control este año lo hemos dedicado a esa labor de inspección. A la fecha hay cinco cajas intervenidas que son Comcaja, Cafaba, Camacol, Comfamiliar Cartagena, Comfasucre y cuatro con vigilancia especial, Comfacor, Comfenalco Valle, Comfacesar y Comfaoriente. 

No dudaremos en aplicar las acciones que sean necesarias para garantizar la transparencia y el buen funcionamiento del sistema. Nuestro trabajo es realizar una vigilancia acertada para garantizar que cada peso que llegue a las cajas sea invertido en los trabajadores.

¿Qué se ha detectado en esas visitas a cajas en problemas?

El año pasado visitamos 22 cajas. Las cajas intervenidas tenían procesos que pasaron a la justicia ordinaria. En Sucre, por ejemplo, había muchos procesos  que no caminaban. Por eso le pedimos a Transparencia Presidencial un acompañamiento en esos procesos para saber quiénes fueron los culpables de esos malos manejos. La caja de Sucre tiene hoy un déficit de $90.000 millones y allá se perdió hasta la plata de los subsidios. Gracias a los nuevos programas de vigilancia esas intervenciones se han basado en un nuevo modelo para que arroje resultados y las cajas intervenidas se recuperen. 

 ¿Cómo va el caso de Comfenalco Valle del Cauca?

Ha habido todo un ruido alrededor de la caja. La Superintendencia hizo una visita en diciembre del año pasado e impuso una medida de vigilancia especial que es una tarea preventiva. Es decir, que la entidad debe dejarse acompañar en  decisiones que son orientadas por un agente y un equipo de la Superintendencia. Vamos a rendir un informe este mes que servirá para saber cómo va esa vigilancia. En Comfenalco Valle están haciendo un gran esfuerzo, pues es una entidad que es patrimonio regional que creció mucho en los últimos 20 años, pero debe mejorar cosas.  

¿En cuánto se amplió la cobertura de las cajas este año?

Al inicio de este Gobierno se pasó de 6 millones afiliados a 8 millones 400 mil y de 15 millones a 19 millones de beneficiarios. Y a partir del 2014 y por ley los empleadores de taxistas, madres comunitarias y empleadas domésticas están obligados a aportar a las cajas de compensación familiar.  Esto ha permitido afiliar a más de 230.000 colombianos más a la fecha. Con base en ello el sistema ha crecido un 50% entre los años 2010 y 2015.

En este momento hay 532.000 empresas afiliadas al sistema del subsidio familiar, lo cual comprueba la solidez del sistema.

¿En el Valle cómo ha sido ese crecimiento?

Desde que asumí como Superintendente del Subsidio Familiar, el número de afiliados a las cajas de compensación familiar ha aumentado en114.347 y la cuota monetaria se incrementó en $2.722 por trabajador.

¿Pero cómo lidiar con una informalidad laboral que todavía pesa en el mundo empresarial, y que por supuesto no aporta a las cajas?

El crecimiento en número de afiliados y beneficiarios es una demostración de que cada vez más empresas se están formalizando e ingresando al sistema. Por eso decimos que el impacto es hoy en 19 millones de colombianos. Es decir, que otras cuatro millones de personas pasaron a beneficiarse del subsidio familiar, lo que ha redundado a su vez en la reducción del desempleo.

Algún analista dijo que ciertas cajas arriesgan mucho en negocios comerciales al abrir muchos supermercados. ¿Cuál es su apreciación?

Es positivo para las que son exitosas. Colsubsidio es exitosa en su red comercial y ha logrado rentabilidad adicional para la caja. Cafam entregó sus droguerías al Éxito y esos recursos se reinvertirán en el sistema.

¿En qué se enfocará más  la Supersubsidio en el 2016?

En seguir reforzando esa vigilancia. Pero el tema de una mayor cobertura es determinante para el Gobierno, y saber cómo logramos que cada trabajador afiliado al sistema pueda acceder a los servicios de las cajas. Y eso tiene que ver con revisiones de tarifas. Las cajas tienen la red más grande de  recreación del país. Los costos están un poco altos, y lo que estamos es adelantando pactos para que más gente vaya a los parques.