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Juan Valdez saldrá a la bolsa en el 2018: Roberto Vélez

El Gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, dice que la idea es que la gente del común invierta en acciones.

12 de octubre de 2015 Por: Colprensa.

El Gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, dice que la idea es que la gente del común invierta en acciones.

Dentro de tres años los inversionistas grandes y pequeños tendrán la oportunidad de participar en el negocio que impulsó la imagen del café colombiano en el mundo.  De acuerdo con Roberto Vélez, gerente general de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), la salida de Juan Valdez a bolsa “es una opción magnífica”, dijo. Se trata de uno de los primeros proyectos que esboza el dirigente de los cafeteros como una forma de continuar impulsando el café colombiano, pero esta vez a través del mercado accionario doméstico e internacional.  Juan Valdez tiene hoy 250 tiendas en Colombia, de ellas 30 en el exterior. ¿Cuál es la meta de expansión de Juan Valdez?No me he puesto una meta. Lo que uno ve es un negocio rentable y muy consolidado. Esto de montar tiendas de café no es tan fácil como uno cree. Hoy es un negocio cuyos ingresos vienen de la operación nacional en 70% y 30% del exterior.  ¿Le suena la opción de salir a Bolsa?Me parece magnífica está pensado para 2018, veremos como sigue la evolución de Procafecol, se lo merece, la idea es ser un activo hoy, poder salir a bolsa y que la acción se transe en mercados financieros y la gente del común pueda participar en un negocio cada vez más rentable. ¿Cuál es la mayor preocupación de los cafeteros?Que la actividad dejó de ser negocio y se volvió una ecuación muy frágil. Por muchísimas razones el beneficio ha venido dando cero o casi negativo. La angustia de los cafeteros pasa por todo lo que les golpea el ingreso y les incrementa los costos: cambio climático, variedades nuevas, insumos, mano de obra, crédito, etc. ¿Cómo espera que se comporte el precio?Los precios del café están colgados como todos los productos básicos y con una tendencia a la baja. Una de las variables que más golpea el valor es quién tiene los inventarios y hay un nivel en los países consumidores que para mí es preocupantemente alto porque no deja despejar las señales de oferta y demanda.  El segundo componente es el dólar, porque tenemos una actividad que está en más de 90% orientada a la exportación. Yo creería que la divisa ha encontrado una zona de confort en los $3.000, mientras sea así puedo augurar que los precios del grano serán parecidos a lo que tenemos ahora. ¿Qué precio le gustaría?Uno precio que le pagara el costo a los productores y les dejara algo más, que les de sostenibilidad económica. Nos vamos a concentrar en un precio que le devuelva la rentabilidad al negocio y permita reinvertir, que haga que las nuevas generaciones vean atractivo el cultivo cafetero y lo encuentren en él una opción de vida no como ahora que dejan el campo. ¿Qué pasó con la propuesta d e crear un fondo de estabilización para remplazar el PIC?La estamos mirando. Los cafeteros han venido solicitando un fondo de sustentación (un precio fijo a pagar independientemente del comportamiento de las variables que forman el ingreso). El problema es que hacerlo es muy costoso.  En el pasado el patrimonio del Fondo Nacional del Café se acabó por esa vía. Estamos mirando y trabajando en la posibilidad de hacer un fondo de estabilización para tratar de que las caídas de precio sean un poco más suaves, producto de un ahorro. El otro año se le renueva al gremio la administración del Fondo Nacional del Café. ¿Va a haber cambios?Lo que tenemos que hacer es renovar y modernizar el acuerdo que existe con el Gobierno para ese manejo de esos recursos parafiscales autoimpuestos. Me reuní con el ministro de Hacienda y estamos empezando a plantear qué queremos hacer, para dónde queremos ir. Pero no tiene grandes cambios. ¿Impulsará una reforma a los estatutos de la Federación?Los estatutos son como nuestra constitución política, un reglamento que nos hemos impuesto sobre cómo queremos que el gremio funcione. Eso es dinámico, tiene que reflejar la realidad del entorno. Hoy tenemos una serie de recomendaciones como la Misión Cafetera o la Misión Rural que de alguna manera van a afectar el negocio cafetero interno y externo. Estamos obligados a revisarlas antes de hacer una reforma entre todos. Usted se comprometió a trabajar por la unidad del gremio. ¿Cómo lo va a lograr?Para trabajar como gremio hay que escoger una persona que represente esa unidad y, la verdad, eso estaba un poquito descuadrado. En este corto periodo de tiempo hemos ido a donde están los cafeteros. Si soy capaz de recoger sus angustias, expectativas y esperanzas para tramitarlas antes las diferentes instancias tratando de buscar soluciones, se verá esa unidad gremial, el valor de estar juntos. ¿Está estudiando la posibilidad de flexibilizar los requisitos de exportación?Estamos pensando modernizar el esquema de exportación cafetera, porque nos quedamos un poco rezagados. Hemos estado tratando de flexibilizar la venta externa de calidades inferiores. Por norma si el grano no tiene ciertas características no puede salir y se queda para consumo interno.  Pensando en los efectos de El Niño sobre la calidad se nos da la ocasión de que algo de esa producción pueda llegar al mercado internacional, donde se toman de todo. Nosotros hemos restringido las ventas a un nivel y lo hemos mantenido, ahora esa decisión se está analizando con los federados y el Gobierno. ¿Cuál será su estrategia para incrementar el consumo local?Una de mis grandes frustraciones ha sido el consumo interno, no hay ejercicio que no se haya hecho ni consultor que no se haya traído para tratar de mejorarlo. El programa Toma Café está trabajando, conjuntamente con la industria, para llevar el consumo de 1,5 millones de sacos a 1,9 millones en 2020, todavía lejísimos de Brasil. ¿Qué tan importante es el programa de cafés especiales?Es hoy la punta de diamante de lo que estamos haciendo. Yo no puedo influenciar los precios internacionales pero sí tratar de obtener mejores ingresos por esta vía. Allí Colombia tiene que hacer un esfuerzo enorme y no pararemos.  Casi 40% de los cafés que vende hoy la Federación son especiales. Sería bueno hacer unas macrorruedas como las de ProColombia, pero con estos cafés para continuar impulsando la calidad del grano nacional en el mundo. Bancarización de caficultoresA la fecha, un total de  355.476 caficultores ya cuentan con la nueva Tarjeta/Cédula Cafetera Inteligente, lo que constituye uno de los procesos de bancarización rural más importantes en Colombia y el mundo, no sólo por su envergadura, sino por el poco tiempo en que ha tenido lugar.El proceso de migración  a la nueva Cedula Cafetera Inteligente comenzó en septiembre de 2014 y a la fecha presenta un avance de 78%.  La Federación hace un llamado a los cafeteros que aún no han renovado o activado su cédula cafetera para que lo hagan antes del 31 de diciembre de 2015.Con la nueva cédula los  cultivadores podrán acceder a créditos y a precios favorables a la hora de comprar insumos.

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