El Ministro de Agricultura escuchó las quejas y las propuestas de los arroceros

Juan Camilo Restrepo manifestó su preocupación por la nueva ley sanitaria de los Estados Unidos y dijo que si no se entiende y maneja bien, podría ser una talanquera para el comercio binacional.

La ya inminente entrada en vigencia del ratificado TLC entre Colombia y Estados Unidos sigue causando dolores de cabeza en sectores de la economía nacional.Este jueves y viernes la palabra la tomaron los arroceros del país, quienes se vieron cara a cara con el ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo Salazar, durante el ‘34 Congreso de Industria Arrocera’, que se cumplió en Bogotá.Ese fue el escenario para que cultivadores de arroz como Eudoro Álvarez, representante de los arroceros del Meta, Arauca y Casanare; y Roberto Botero, vocero de los cultivadores del grano en el Tolima y Huila, reiteraran su inconformismo y reclamaran salidas a la crisis que, dicen, se les viene encima.Álvarez y Botero hacen parte del ‘Movimiento por la dignidad Nacional Arrocera’, del que explican que ha nacido porque temen que tan pronto se dé el cruce de cartas entre los dos gobiernos, desde Estados Unidos empiecen a ingresar al país, mínimo, 79 mil toneladas de ‘arroz cáscara’ por año, a precios por carga de 84 mil pesos, valor inferior al que a los productores internos se le pagan por similar cantidad: 130 mil pesos.En el corto plazo no sólo va acabar con la industria, señalaron, sino que pondrá en serio peligro la subsistencia de 300 mil familias arroceras, asentadas en once departamentos del país, y terminará con buena cantidad de las 480 mil hectáreas de arroz que se siembran hoy.Al escuchar los pronunciamientos de los cultivadores, el jefe de la cartera de Agricultura, Juan Camilo Restrepo Salazar tuvo una respuesta rotunda: “el debate sobre los TLC ya es anacrónico; para la agricultura y la ganadería los TLC representan grandes desafíos y oportunidades. Hay que prepararnos más, para exportar al amparo de ellos”.Propuestas de los arrocerosLos cultivadores esperan que del programa DRE (sustituto del AIS) se dispongan partidas anuales superiores a los 500 mil millones de pesos, que sean destinadas no al grueso de la agricultura, sino a sectores específicos: avícola, lechero, maíz y, por supuesto, el arrocero.Esa no es la única propuesta. A este rubro se espera que se sume otro porcentaje cuyo fin sea exclusivamente la investigación y la capacitación, sin dejar de lado una drástica disminución tributaria para la compra de maquinaria, pues consideran que la carga impositiva es muy alta. Al respecto, esperan que ésta se reduzca, por lo menos, en un 50 por ciento.Colombia está abastecidaRestrepo les informó a los cultivadores que por ahora no hay necesidad de importar más arroz, debido a que el país tiene suficiente: “Por el momento, Colombia está muy bien abastecida no sólo de arroz sino de sus alimentos básicos y no vemos la necesidad de autorizar importaciones adicionales a las que ya se tramitaron en el primer semestre del año” , dijo.De la misma manera, el ministro defendió las funciones que viene desarrollando el Consejo Nacional del Arroz, al que consideró como el foro natural para discutir, concertar y afianzar la política arrocera del país, pensando siempre en el interés de los consumidores y de los 500 mil colombianos que viven del cultivo de arroz (según cifras del ministerio) .Finalmente, Restrepo Salazar reiteró la preocupación de su despacho por la nueva ley sanitaria de los Estados Unidos, sobre la que dijo que si no se entiende y maneja bien, podría ser una talanquera para el comercio binacional.