El pais
SUSCRÍBETE

El colectivo caleño que se la está jugando por los negocios de alimentos saludables

El colectivo La Rosca también está presto a desarrollar iniciativas en otros campos. En su trabajo nacieron otros proyectos, entre ellos La Chiva, un mercado agroecológico y de emprendimiento en Cali.

6 de julio de 2016 Por: Valentina Echeverry Segura | Integrante del Semillero de Periodismo UAO-El País

El colectivo La Rosca también está presto a desarrollar iniciativas en otros campos. En su trabajo nacieron otros proyectos, entre ellos La Chiva, un mercado agroecológico y de emprendimiento en Cali.

La Rosca es un colectivo conformado por cinco profesionales de diferentes áreas que se la están jugando por fomentar el emprendimiento local, específicamente en el área de la alimentación saludable.

Hacen parte del colectivo Jaime Borrero del Valle, de 32 años, administrador, quien se encarga dentro de las relaciones públicas y el apoyo administrativo. Ángelica Raymond, de 31 años, psicóloga, especialista en arteterapia, quien cursa  una maestría en Gerencia de la Innovación Social. Dentro del colectivo su punto más fuerte es el área del talento humano. Heydi Velásquez es tecnóloga en gestión administrativa,  tiene 24 años y es la responsable de la logística. Isabella Bedoya, de 30 años, es comunicadora social y periodista, fotógrafa, brindaasesoría en imagen corporativa y producción audiovisual. Y Martín Liévano, 37 años, es especialista en innovación y emprendimiento. Se encarga de la gestión de los proyectos.

Algunos de los integrantes de La Rosca empezaron ayudando a poner en marcha una de las kermesses realizadas por la Asociación de Egresados de la Universidad de los Andes, Uniandinos, en mayo de 2015, la cual también tenía como foco los alimentos. En ese proceso empezaron a conocer a muchos emprendedores que estaban interesados en participar, pero que carecían de fortalezas en este proceso.

“Pensamos en ayudarlos para que en el momento que salieran al mercado, estuvieran mucho más fortalecidos, que no fuera simplemente un evento al que ellos iban, participaban, vendieran y ahí quedó todo. Quisimos involucrarnos un poco más en ese proceso del desarrollo de ellos como emprendedores, por eso, empezamos a darles una serie de capacitaciones, charlas, talleres, para que corrigieran algunas falencias”, cuenta  Liévano.

En octubre de 2015 se independizaron y crearon La Rosca para continuar con el proceso, ayudando a los emprendedores con asesorías, capacitaciones y actividades de comercialización, es decir en ferias y eventos para que pudieran llegar al mercado más fortalecidos.

De esta manera también promueven el consumo de alimentos saludables y  la proyección de los emprendedores de estas empresas a futuro.

“Somos La Rosca precisamente porque queremos ser una rosca inclusiva, queremos ser un grupo que potencialice el desarrollo de lo que está pasando en nuestra región”, afirma Isabella Bedoya.

En el momento que empezaron nacen otros proyectos, entre ellos La Chiva, el evento de alimentación saludable. A través de este benefician a emprendedores de esa categoría.

 La Chiva es el primer mercado agroecológico y de emprendimiento en Cali. “Las personas necesitan espacios para encontrar alimentación saludable y además, asistir con toda su familia e inclusive, con sus mascotas, por eso, en los eventos tenemos escenarios adecuados para cada uno”, cuenta Angélica Raymond.

Diferentes emprendimientos han hecho parte de La Chiva. Por ejemplo,  Amor – Amor (repostería y almuerzos saludables) ha estado con ellos desde el 2015 y han asistido a varias de las capacitaciones como ‘Canvas’ (metodología para encontrar el modelo de negocio adecuado) y ‘Manejo de redes sociales como punto de partida de la comercialización de los productos’.

“Estos procesos fueron interesantes, prácticos, motivadores e importantes para centrar mi negocio, innovar y tener herramientas más consolidadas para emprender de manera sostenible. El acompañamiento me ha permitido crecer, diversificar mi oferta de productos e incluso fortalecer las vías comerciales y tener nuevos clientes”, afirma Claudia Helena Correa, gerente y chef de ‘Amor - Amor’. 

Agrega que  se enorgullece por pertenecer a una red de emprendimientos que genera nuevas iniciativas para fortalecer su marca. “Estamos felices de subirnos a la chiva una vez más”, concluye.

También existen otros emprendimientos como YoVital (pastelería artesanal) que están satisfechos con el proceso que llevan con La Rosca. Maritza Narváez, gerente de producción, cuenta que “participar de La Rosca como emprendedora ha sido un proceso de crecimiento total. Desde que empezamos hace aproximadamente un año hemos recibido acompañamiento permanente, iniciamos con capacitaciones enfocadas en el desarrollo del modelo de negocio a través del Canvas. Adicionalmente recibimos información relacionada con mercadeo, tuvimos una sesión de fotos personalizada y nos capacitaron en la correcta manipulación de alimentos”.

 Extienden sus alas

Los integrantes de La Rosca iniciaron trabajando con emprendimientos de alimentación, pero en el camino han ido apareciendo de otros tipos. Por eso, desarrollaron un modelo que fuera fácilmente replicable, y por ello quieren apuntarle al área de emprendimientos emergentes de la moda y el diseño. Sin embargo, están dispuestos a apostarle a cualquier emprendimiento que pueda tener cabida dentro del mercado.

Actualmente La Rosca tiene un grupo de 36 emprendimientos vinculados, todos en diferentes estadíos del emprendimiento, pero emergentes, con los que han conformado un clúster de alimentación saludable y se están formando redes de trabajo colaborativo. Con algunos de estos (10 específicamente), cuenta Liévano, venimos trabajando temas de acompañamiento personalizado, es decir, asesorías.

AHORA EN Economía