Jackeline Rentería ya realiza trabajos físicos después de su operación

La deportista vallecaucana que se recupera de una fractura del maxilar inferior aspira a estar plenamente recuperada en seis semanas.

Después de su operación del maxilar inferior, la luchadora caleña Jackeline Rentería no pierde ni un solo instante y ya realiza trabajos físicos en el marco de su recuperación que cumple en Bogotá, en compañía de su entrenador y con el aval de los encargados del servicio médico del Centro de Ciencias del Deporte de Coldeportes.

Desde el primer momento los médicos han estado sorprendidos por el alto umbral del dolor que maneja Jackeline, situación que sin lugar a dudas le ha permitido mantener, sin ningún tropiezo, su trabajo físico y de esta manera no perder su estado de forma.

Por el momento está alejada del cualquier tipo de contacto corporal, pero la medallista olímpica no pierde la tranquilidad y recuerda que no es la primera vez que pasa por una situación similar “para Beijing 2008 viajé con medio ligamento cruzado de la rodilla izquierda, para Londres 2012 logré la clasificación en último momento y ahora nuevamente pasa algo”.

Pero a pesar de todas estas circunstancias siempre sale adelante y demuestra día a día su tenacidad y persistencia. Y lo más importante nunca baja los brazos y por el contrario es una agradecida por las pruebas que le pone Dios y recuerda sin cesar que “todo lo puedo en Cristo que me fortalece” y a la vez en su visita a la directora de Coldeportes Clara Luz Roldán le agradeció el apoyo que ha recibido de Coldeportes.

Rio 2016 está en la mente de la luchadora desde el mismo instante en que terminó su participación en Londres, han sido cuatro años en los que se ha visualizado en los Olímpicos y nunca ha perdido ni un solo instante “hoy estoy operada y quizás no pueda trabajar con lo de la lesión, pero tengo más parte del cuerpo que no puedo dejar quietas” son las palabras de una medallista olímpica que por ahora continua con su mente clara y puesta en Rio 2016.

Hasta finales de Julio permanecerá en Bogotá manteniendo su rutina de trabajo y esperando que en seis semanas reciba el alta médica definitiva y pueda reanudar con sus sesiones de combate donde pondrá en marcha todas las alternativas tácticas que ha planificado con su entrenador.