Independiente Santa Fe es el nuevo líder de la Liga Águila

El 'León' salió de su jaula como si lo hubieran encerrado durante un mes sin recibir alimento. Tenía un hambre voraz, y quería comerse rápidamente a los 'Pijaos', quienes llegaron a El Campín con el objetivo de cazarlo, o al menos herirlo.

El ímpetu de los 'Cardenales' los llevó a generar en tan solo 6 minutos una acción clara de abrir el marcador. El autor intelectual de los hechos fue el delantero Anderson Plata, quien tras 'romperle' la cintura a un rival, tiró la esférica por encima del arco, cuando tenía el ángulo perfecto para anotar.

En medio de la avalancha 'Roja', el Vinotinto y Oro pudo generar a los 20 su primera llegada de peligro, cuando Marco Pérez aprovechó un error del contrario en la entrega de la esférica, y todo culminó con un disparo suave e incómodo de Santiago Montoya.

A los 29, a pesar que la mayor proyección ofensiva del local se registraba por el sector derecho, los capitalinos sorprendieron por izquierda con un centro largo y a ras de piso de Jhon Pajoy, aprovechado al máximo por Sebastián Salazar con un disparo seco y contundente, inatajable para Joel Silva.

Parecía que el 'Expreso Rojo' se iba al descanso con la mínima ventaja. Sin embargo, el artillero Marco Pérez se hizo presente en la pizarra (44'), como tiene acostumbrada a la hinchada 'Pijao' en las últimas fechas.

Sebastián Villa, al ver que no tenía ninguna marca en su zona, lanzó la redonda al área y allí estaba muy atento el chocoano, para con su cabeza vencer a Leandro Castellanos, quien hizo un enorme pero infructuoso esfuerzo por evitar que sus tres palos fueran vulnerados.

Para la segunda mitad, ambos conjuntos salieron bastante activos. El choque se puso de ida y vuelta. Ninguno se mostraba conforme con la igualdad, aunque Santa Fe tuviera asegurado su tiquete para la segunda ronda, y el cupo del Deportes Tolima entre los ocho no peligrara.

A los 71, un contragolpe de Sebastián Villa parecía que iba a terminar en el 2-1, pero no fue así por la intervención de Castellanos. Y el dueño de casa respondió a los 76 con un 'bombazo' de Plata, que afortunadamente pasó por encima del horizontal.

En el 81, el banquillo técnico de 'La Tribu' sudó frío en la capital de la República cuando Salazar soltó un disparo que obligó al meta 'Guaraní' a volar de manera espectacular para conservar la igualdad, la cual se mantuvo hasta el silbatazo final del árbitro Wílmar Roldán, de impecable actuación en El Campín.