Fernando Llorente quiere ir a Brasil 2014 por el camino de la Europa League

Llorente forma con Carlos Tévez la pareja más goleadora de Italia (34 tantos, los mismos que Immobile y Cerci, del Torino).

El delantero de la Juventus, Fernando Llorente, afronta el jueves la vuelta de semifinales de la Europa League ante el Benfica con el objetivo de sacarse la espina de la final que perdió en 2012 y ganar opciones de estar en la lista española para el Mundial 2014. Su perfil de girafa y su juego de cabeza se ha complementado a la perfección con el estilo aguerrido de puma del argentino Carlos Tévez, con quien conforma una dupla de respeto en el Calcio. El navarro suma 15 goles en su primera campaña en la Serie A, el último el pasado lunes con un espectacular taconazo en la victoria contra el Sassuolo (3-1) que deja a la Juventus a un paso de lograr su tercer 'Scudetto' consecutivo. Pero sus inicios en Italia no fueron fáciles. Llegó el pasado verano después de seis meses en el banquillo del Athletic de Bilbao, que no aceptó que su jugador más valorado no quisiera renovar y anunciara que cambiaba de aires. Agotado psicológicamente, el técnico Antonio Conte tardó varias semanas en confiar en el espigado ariete rubio, al que se llegó a considerar en Italia la gran decepción del mercado de fichajes. "Tuve muchas dudas, incluso pensé en renunciar. Pero bajé la cabeza y continué luchando", señaló Llorente, que inició su ascensión con cuatro goles en cinco partidos en otoño. Segunda oportunidad en la Europa LeagueLlorente ya disputó una final de la Europa League, la de Bucarest en 2012, y se llevó una de las mayores decepciones de su carrera. El Athletic, dirigido entonces por el argentino Marcelo Bielsa, cayó por 3-0 con el Atlético de Madrid con un doblete del colombiano Radamel Falcao García. Antes el atacante había sido uno de los héroes del equipo vasco en la competición, al lograr seis goles, dos en la famosa victoria contra el Manchester United en octavos (3-2/2-1) y el de la clasificación para la final a dos minutos de que acabara el choque de vuelta contra el Sporting de Portugal (1-2/3-1), que celebró llorando en un córner del estadio de San Mamés. Ahora tiene la oportunidad de sacarse la espina con la Juventus, que llegó a la Europa League tras caer en la fase de grupos de la Liga de Campeones y que cuenta con el aliciente de que disputaría la final en su estadio. Pero antes deberá remontar el 2-1 adverso de la semana pasada en Portugal ante el Benfica, que busca su segunda final consecutiva tras caer ante el Chelsea el año pasado. El sueño de BrasilLa otra 'guerra' de Llorente es convencer al seleccionador español Vicente Del Bosque de que tiene un sitio entre los 23 convocados para el Mundial de Brasil, después de fomar parte del equipo que logró la corona mundial hace cuatro años en Sudáfrica y la europea hace dos en Polonia y Ucrania. A sus 29 años (24 partidos con España y 7 goles), Llorente sigue pagando su falta de protagonismo el curso pasado que le sacó del grupo cuando se había convertido en un jugador fijo. Con el hispano-brasileño Diego Costa como indispensable en el ataque de España, hay varios candidatos para acompañarlo. David Villa, Fernando Torres, Álvaro Negredo y el propio Llorente se juegan una o dos plazas. "Será difícil entrar en la convocatoria, pero daré todo hasta el final de la temporada. No pierdo la esperanza", dijo Llorente. Una final de la Europa League contra un equipo español, el Sevilla o el Valencia (que disputan la otra semifinal). La ocasión parece perfecta para que Llorente le demuestre a Del Bosque que está de vuelta.