América de Cali y Atlético Bucaramanga empataron en el Pascual Guerrero

En la octava fecha del torneo de ascenso, los Rojos repiten como locales ante otro histórico en la B, el Deportivo Pereira.

América de Cali empató sin goles (0-0) con Atlético Bucaramanga, la noche del lunes en el estadio Pascual Guerrero y por la séptima fecha del Torneo Postobón I de 2014.Chocaron en la cancha del barrio San Fernando dos históricos de la A que hoy buscan regresar a la división de honor del fútbol colombiano.El equipo que dirige Jhon Jairo López llegaba a este partido luego de tropezar en el fortín de otro histórico en la B, el Unión Magdalena, con el que perdió por 1-0 en el Metropolitano de Barranquilla.Los búcaros, por su parte, que tienen en el banquillo a un extécnico del América, el vallecaucano Bernardo Redín, venían de golear por 3-1 al Valledupar.Lo mejor del Primer TiempoApenas se jugaba un minuto del partido y los Rojos ya metían susto. Tapiero robó un balón en plena salida de los amarillos, no se complicó, remató de primera, potente derechazo desde unos 25 metros, llevaba sello de gol pero el arquero Aguirre se exigió y la manoteó sobre el vertical diestro. Atajadón y salvada.Promediando el primer cuarto de hora de juego, América lucía sólido y reiterativo en sus intenciones ofensivas. Los de Jhon Jairo López buscaban de manera constante el arco de Aguirre, sobre todo con salidas de Balanta y Palacios por izquierda y derecha.Tapiero cumplía funciones de quite, pero asimismo se encargaba de empujar al equipo desde zona medular, buscando sociedades con 'Café' Mendoza y Peñaranda. Bucaramanga esperaba e intentaba contragolpear con su principal referente, De Porras.En 21 minutos los Rojos tuvieron una clarísima para romper los ceros. Fútbol de construcción con Córdoba, Peñaranda y Mendoza, el 'Café' recibió un balón desde el costado izquierdo, a media altura, le pegó casi desde el suelo, con botín zurdo y la estrelló en el horizontal. Tenía que terminar en el fondo.Sobre 30 minutos se registró una pifia arbitral. En un mano a mano dentro del área del Bucaramanga, Luis Rivas trabó por detrás a Jhon Córdoba, era pena máxima clara que Lisandro Castillo ignoró por completo.En los últimos 15 minutos el equipo de Bernardo Redín dejó de esconderse, se animó a proponer fútbol y, sin inquietar demasiado los predios de Alexis Viera, por lo menos se quitó de encima la presión de los Diablos Rojos.En los Rojos no se encontraba un referente en la generación ofensiva. A veces asumía esa función Tapiero, también se animaban Córdoba y 'Café' Mendoza, Lucumí estaba totalmente perdido. El Segundo Tiempo en detalleEn dos minutos, Balanta desbordó por izquierda, metió un centro largo y elevado, a segundo sector, 'Café' Mendoza alcanzó a conectar en el límite de la cancha, la metió a zona de candela pero no apareció nadie para capitalizar ese rebote. Primera aproximación del Rojo en la complementaria.A los 12 minutos y con un América que no encontraba un jugador diferente en la cancha, 'Café' Mendoza enganchó un balón en el costado derecho del área Leoparda, tenía que buscar el remate de zurda, pero prefirió juntarse con Peñaranda, quien fue fácilmente anticipado. Tras esa jugada, Mendoza fue relevado por el español Jorge Brazález.Los de 'J.J.' López no dejaban de buscar los predios Leopardos, pero su ofensiva no llegaba con suficiente potencia a las 16 con 50. A Peñaranda no le llegaban balones para encarar y tenía que buscar la esférica muy lejos del arco.En 25 minutos, jugadores de iniciativa como Tapiero ya habían llegado al límite de su tanque de oxígeno y deambulaban por la cancha sin aportar mucho al fútbol ofensivo.Sobre 29 minutos América dilapidó. Centro de Tello desde el costado derecho del área rival, balón a zona de riesgo, en cinco con cincuenta se erigió Jorge Brazález, cabeceó con el arco en sus narices, la clavó contra el piso y la redonda pasó acariciando la base del vertical diestro. Despilfarro.Las jugadas individuales eran muy intermitentes en los Diablos Rojos, que se volvían reiterativos en levantar la pelota buscando la testa del español Brazález, estrategia fácilmente controlada por la espigada zaga del rival.El desespero comenzó a apoderarse del técnico López, quien desde la raya pedía reacción a elementos como Tapiero, totalmente perdidos en el segundo tiempo. Los cambios no le surtían efecto al técnico del América. Tello no pesaba ni arriesgaba, y Brazález, aunque lo intentaba y batallaba en zona Leoparda, le faltaba esa contundencia que mostró en su debut.El cronómetro agonizó y América no pudo descifrar el planteamiento táctico de un Bucaramanga que terminó llevándose un botín del Pascual Guerrero.