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Colombia se blindará más contra ‘hackers’

El Gobierno alista un nuevo documento Conpes donde fortalece estrategias y castigos contra ciberataques. Delitos informáticos cuestan US$500 millones al año.

4 de agosto de 2015 Por: Elpais.com.co | Colprensa

El Gobierno alista un nuevo documento Conpes donde fortalece estrategias y castigos contra ciberataques. Delitos informáticos cuestan US$500 millones al año.

El segundo foro sobre ciberseguridad y ciberdefensa recomendó el lunes la adopción de un nuevo Conpes para combatir este tipo de delitos, ya que el actual se vence en diciembre. Lea también: Colombia busca fortalecer la lucha contra el delito informático

 Y es que ataques recientes como el de la famosa página de citas extramaritales 'Ashley Madison', en el que se hackearon las cuentas de más de 37 millones de usuarios, o la más reciente y más cercana a nosotros con la Agencia Nacional de Hidrocarburos, que  debido a la cción de los ‘hackers’  se perdieron algunos estudios en materia de exploración.

 Por tal motivo, el ministro de las TIC, David Luna, señaló que este Conpes  no sólo debe prevenir, sino atacar este flagelo, adoptando a su vez planes de largo plazo, ya que los delitos informáticos mutan de forma rápida con nuevas variables.

 La viceministra, María Isabel Mejía, solicitó al Departamento Nacional de Planeación, la pronta expedición de este documento en materia de ciberseguridad y ciberdefensa. 

“Ya se conformó el equipo líder, se estructuró un plan de trabajo y adicional a eso, hay establecidas unas mesas de trabajo internas del Gobierno, para establecer el diagnóstico y los avances del Conpes anterior”, señaló el Ministro de las TIC.

 El nuevo Conpes buscará fortalecer el marco jurídico legal para determinar las formas en las que actuará la Fuerza Pública, mejorar la cultura de la ciberseguridad en la sociedad civil, estudiar más a fondo las infraestructuras críticas cibernéticas y por último, el trabajo en materia de cooperación internacional.

 Por su parte, Samuel Alberto Yohai, presidente Ejecutivo de la Cámara Colombiana de Informática y Telecomunicaciones (CCIT), indicó que los delitos cibernéticos le cuestan a Colombia alrededor de US$500 millones -cifra que puede ser mayor- y a nivel mundial US$130.000 millones, una suma que está muy por encima de los recursos que mueve el narcotráfico. 

Además, agregó que las entidades del Gobierno son las que más ciberataques sufren, en un 35%; en ese sentido, las empresas señalan que  un 76% de estos ataques se han vuelto cada vez son más sofisticados, y que el porcentaje de directivos que se preocupan por blindar sus empresas contra este flagelo, es muy bajo

 En Colombia hay un 52% de software ilegal instalado, según el experto, lo que mostraría un desconocimiento de los peligros de instalar este tipo de programa, que podría llevar a sanciones penales y también a la filtración de información de los equipos donde fueron instalados.

 “No solamente es generar conciencia entre los usuarios, sino también entre los directivos de las empresas, que las responsabilidades no están en mano de los directivos de tecnología de la empresa, sino, en el representante legal que podría llegar hasta a responsabilidad penal para miembros de juntas directivas”, indicó.

 Yohai, también manifestó que la cooperación internacional es esencial, pues muchos de los ciberdelitos que se dan en el territorio de algún país, son planeados desde afuera, ya que no existen las 'ciberfronteras', además tiene modificaciones de muy cortos tiempos. 

Frente a lo que sería el nuevo Conpes, el dirigente resaltó que “necesitamos  un marco de referencia, bastante amplio y estratégico, no algo puntual y rígido. Así como el ciberdelito irá cambiando, las autoridadeberán mantenerse muy ágiles y mal haríamos en desarrollar un documento muy lineal. Debe ser más bien un compendio de normas que busquen, no solo blindarlos contra esos ataques, sino la forma de castigarlos”, indicó.

Páginas web y las redes informáticas de las entidades públicas son las que mayores ataques sufren por parte de los ‘hackers’. Luego están las empresas privadas.

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