Se agudizan los combates entre grupos armados ilegales en el Cauca

Se agudiza la crisis humanitaria en diferentes sectores del Cauca, a raíz de los constantes enfrentamientos entre grupos al margen de la ley que se disputan a muerte las actividades de narcotráfico en esta zona del país.

Y es que en menos de una semana, de acuerdo con la denuncia de organizaciones campesinas e indígenas, ya van más de seis personas que fueron asesinadas en los combates que se registran en municipios como Balboa y que ya completan una semana.

De hecho, entre la noche del pasado miércoles y en la madruga de este jueves en zona rural de este último municipio se presentó otra masacre. De acuerdo con el relato de la comunidad, disidentes de la entonces guerrilla de las Farc arribaron a una localidad donde hace presencia un grupo que se identifica como 'Autodefensas Gaitanistas de Colombia'.

“Como venganza por la incursión armada que se registró en una finca de Pureto, los compañeros de las víctimas fueron hasta La Bermeja, sector La Vega, donde estaban esos sujetos para después asesinarlos y luego quemar sus cuerpos. No sabemos cuántas víctimas son, hasta el momento confirman que son tres, pero la comunidad está alertando que son más los muertos”, denuncian campesinos de Balboa, quienes por obvias razones piden mantenerse en el anonimato.

Esta segunda masacre, la primera se registró en la mañana del pasado sábado de 3 de agosto, se produce durante la incursión armada que se registra en Balboa y Argelia, donde los estos grupos están suplantando a la autoridad, al punto que adelantan retenes en las vías de la zona.  

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Para confirmar esta situación, la comunidad compartió imágenes donde se observan cómo quedaron los cadáveres luego del enfrentamiento que se inició alrededor de las 7:00 de la noche de este miércoles.  

“Aquí, en Balboa, anteanoche y anoche en la Vereda El Paraíso este grupo ha montado retenes de las Autodefensas Gaitanistas, parando carros y haciendo control territorial, mientras que a diez minutos está el Ejército y la Policía”, denunció por su parte un líder social de la zona.

Pero mientras este es el panorama en el sur del Departamento, en el norte la situación es igual de compleja al punto de que hasta los periodistas fueron declarados objetivos militares por parte de los grupos armados que delinquen en municipios como Caloto, Corinto, Toribío, entre otros. La razón: informar sobre la violencia que genera el narcotráfico.

A raíz de esta situación, el gobernador del Cauca, Óscar Campo, envió una carta al presidente Iván Duque donde solicita ayuda para contrarrestar este fenómeno de violencia, luego de mostrar las acciones que adelanta el gobierno regional para brindar seguridad a las comunidades asentadas la región.

“Esta situación, señor presidente, me motiva de manera respetuosa solicitarle que se revise en el marco de la capacidad instalada, cómo podemos fortalecer el trabajo mancomunado para actuar articuladamente y equilibrar la capacidad de respuesta, especialmente en el norte del Cauca, donde contrario a otras regiones, se ha recrudecido el conflicto”, expresó el mandatario de los caucanos en la carta enviada a Duque Márquez.

A la par con este requerimiento, el mandatario reconoce la existencia de tres grupos de disidentes así como la organización autodenominada 'Autodefensas Gaitanistas de Colombia' o 'Héroes de la Cordillera' y el 'Ejército de Liberación Popular' o 'los Pelusos'.  

“En medio del consejo de seguridad, adelantado el lunes, quedó claro que no hay registro de la llegada de emisarios de los carteles mexicanos al Cauca, como se puede corroborar con Migración Colombia, Ejército y Fiscalía, pero sí es una realidad que es el narcotráfico la causa principal del accionar de estos grupos criminales, que esperamos reducir a su mínima expresión”, agregó el gobernador de los caucanos.  

Según la Gobernación del Cauca, la problemática de seguridad está afectada por los cultivos ilícitos y las economías ilegales que de allí se derivan, especialmente en la Cordillera Occidental y las zonas de El Naya y Micay, en el Pacífico.

“Se estima de una presencia de 15 mil hectáreas de coca, y en la zona que nos ocupa se calculan unas 233 hectáreas de marihuana tipo 'creepy' en 249 invernaderos, con un potencial anual de 750 toneladas, donde los operativos de la Policía Cauca y la Metropolitana de Cali y el Ejército Nacional han permitido incautar en el último año 89 toneladas, poco menos del 12 por ciento de la producción”, argumento el gobernador del Cauca en la misiva enviada al presidente de la República.