Sandra Morelli niega relación de la Contraloría con interceptaciones ilegales

La contralora Morelli afirmó que la entidad no contrata hackers ni realiza interceptaciones.

La contralora Sandra Morelli negó que la entidad tenga alguna relación con el supuesto hacker Andrés Sepúlveda o con la fachada de inteligencia Andrómeda, desde la cual aparentemente se realizaban interceptaciones ilegales. Según Morelli, la supuesta vinculación de la Contraloría viene desde hace un tiempo, por los exfuncionarios del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) que entraron a laborar en la institución desde la liquidación del organismo."Es totalmente falso que nosotros tengamos aparatos de interceptación; no tenemos personal capacitado para eso, ni tenemos una unidad de Inteligencia. Además de que no es la manera como se ejerce el control fiscal, que se limita a verificar si los recursos se aplicaron o no, si se realizaron las obras, si se prestó un servicio, si el mismo se hizo en condiciones económicas transparentes suficientes; nosotros no hacemos el mismo trabajo que la Fiscalía, que es establecer cómo funcionan las redes criminales", dijo Morelli. Según la Contralora, la entidad recibió a varios exfuncionarios del DAS, porque habían sido despedidos de una manera injusta y no se les había reconocido sus derechos como a los demás, así que decidió vincularlos para "darles un trato equitativo y cuando algunos de ellos se comportaron de manera inadecuada fueron denunciados por la institución". "Lo que quiero decir es que las acusaciones de la Fiscalía en contra de la Contraloría no son algo nuevo, eso viene desde que el señor (Ramiro) Bejarano y la señora (Cecilia) Orozco decidieron decir que yo les hacía seguimiento e interceptaciones ilegales, ellos mismos dicen que no tienen ninguna prueba", manifestó Morelli. Agregó que "la Fiscalía comienza a investigar cosas que no han sucedido con base a lo que dice una funcionaria que ha cometido una conducta muy grave, que fue no firmar un fallo de responsabilidad fiscal de cara a la nulidad, por eso la separé de la entidad y entonces ella se fue a unirse con estas personas y al diario El Espectador y a la Fiscalía, a mostrarse como víctima y a servir de informante, seguramente de sus patologías mentales, porque yo no sé de dónde sacan todas estas historias".Con lo anterior, la Contralora espera que la entidad que ella dirige ya no sea vinculada con el caso del supuesto hácker, aunque no es muy positiva de las acciones que piensa tomar la Fiscalía en contra de ella.