Obispos de la Costa Pacífica en Colombia hacen un llamado para proteger a líderes de la región

A través de una carta, los obispos de del Pacífico y Suroccidente de Colombia expresaron su solidaridad a los habitantes del Chocó y los pobladores de otras regiones de Colombia en las cuales conflicto social y armado se ha agudizado recientemente.

Debido a esta crisis de orden público que ha puesto en grave peligro a líderes sociales y defensores de Derechos Humanos, la congregación ha solicitado al Gobierno establecer condiciones de vida digna y mecanismos de protección para las comunidades y líderes sociales.

Los religiosos señalaron el caso de Leyner Palacios, sobreviviente de la masacre de Bojayá, perpetrada por las Farc el 2 de mayo de 2002, como a los otros líderes que están en riesgo.

Así mismo, piden a los integrantes de la Fuerza Pública atender las alertas por posibles situaciones de presencia de grupos ilegales, las cuales han sido expresadas por organizaciones sociales y de derechos humanos, y por la Diócesis de Quibdó desde años anteriores, y reiteradas en los últimos dos años.

"En diversos momentos hemos advertido sobre las dificultades que viven muchas personas en el territorio del Pacífico y Suroccidente, y hemos solicitado al Estado colombiano una solución integral que resuelva las causas estructurales que están en la raíz de la crisis humanitaria", dice el texto.

"Alzamos nuevamente nuestra voz de pastores y hacemos un llamado a retomar el sendero de la paz en la perspectiva del respeto a los Derechos Humanos, los Derechos de los Pueblos y el Derecho Internacional Humanitario", resaltaron los Obispos de la Región del Pacífico.

Otra de las peticiones que realiza el colectivo es que se encuentren salidas políticas y pacíficas al conflicto armado por medio del acuerdo de paz con el ELN, las AGC y estructuras similares, para que se posibilite un acogimiento colectivo a la justicia.

Entre las poblaciones más afectadas por el conflicto y las amenazas a líderes sociales están las comunidades indígenas y afrodescendientes de Bojayá, Bajo Atrato y Urabá; las comunidades de las cuencas de los ríos San Juan, Baudó y Nuquí (Chocó), Raposo (Buenaventura), y los municipios de Magüí Payán, Olaya Herrera-Satinga (Nariño) y Puerto Guzmán (Putumayo).

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