Minsalud garantiza medicamentos para enfermos de cáncer

El ministerio aseguró que tomará un paquete de medidas para frenar el desabastecimiento de medicamentos oncológicos. Varios laboratorios se comprometieron a importar los medicamentos que escasean en cuestión de días.

Un paquete de medidas de corto y mediano plazo tomará el Ministerio de Salud y Protección Social para frenar el desabastecimiento de algunos fármacos utilizados en el tratamiento del cáncer, y que tienen en ascuas a cientos de pacientes que dependen de ellos. Según el ministro, Alejandro Gaviria, después de una reunión que sostuvo con representantes de la industria farmacéutica, varios laboratorios se comprometieron a importar los medicamentos que escasean en cuestión de días. Los gremios de la industria: Andi, Afidro y Asinfar se encargarán de hacer un seguimiento a estos laboratorios para que cumplan con lo prometido. Otra de las medidas que tomó el ministerio fue incluir los cinco medicamentos oncológicos más escasos dentro de la lista de vitales no disponibles para agilizar su importación. En la lista están: la mercaptopurina, busulfan, melfalan, tioguanina y el clorambucilo. La mercaptopurina, por ejemplo, se usa para interrumpir el crecimiento de las células cancerígenas producidas por la leucemia linfocítica aguda. Por eso es vital que se mantenga dentro del tratamiento de quienes padecen este tipo de cáncer que se genera en los glóbulos blancos. Hacia futuro, lo que tiene planeado el ministro, es llevar el problema hasta Unasur, para que se empiecen a producir estos medicamentos en asocio con los Gobiernos y el sector privado en la región y evitar una crisis de salud. Y es que el problema de desabastecimiento de medicamentos oncológicos es mundial. Según el ministro Gaviria, se debe a que las farmacéuticas están migrando hacia el negocio de los biotecnológicos, que son más rentables por sus altos costos. Esto ha generado una baja en la producción de medicamentos de origen químico que sirven para tratar varios tipos de cáncer. El problema es que de su producción depende la vida de millones de personas que padecen esta enfermedad.