El presidente Gustavo Petro anunció que este lunes declararía la situación de desastre natural en el país, una medida excepcional adoptada como consecuencia de las intensas lluvias que no han cesado desde principio de año y que han generado impacto en gran parte de los municipios del país.
La declaratoria faculta al Gobierno para destinar los recursos económicos que quedan del presupuesto anual, entre otras medidas, para enfrentar de manera inmediata las emergencias por la ola invernal, según dijo en días pasados el presidente, Gustavo Petro.
En efecto, los planes de acción para mitigar los efectos de la crisis invernal serían implementados en por lo menos 754 municipios afectados hasta ahora, de los 1.100 municipios que conforman el territorio.
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“Ya muchos municipios han superado su capacidad y están acudiendo al apoyo nacional”, dijo el director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Javier Pava Sánchez, quien será el encargado de la reconstrucción de las zonas afectadas por la temporada de lluvias y el Fenómeno de La Niña.
Según dijo Pava, el gobierno asumirá la restitución de derechos básicos, como vivienda, salud y seguridad alimentaria, a los más afectados.
“Los suelos están saturados, los niveles de los ríos están altos, los embalses están llenos. Así sea una lluvia pequeña que se genere, fácilmente termina en un deslizamiento, en una inundación. Estamos en unas condiciones acumuladas bastante complejas”, añadió Pava.
De acuerdo con el articulado de la Ley 1523 de 2012, el marco legal de la declaración de situación de desastre, la UNGRD “elaborará planes de acción específicos para la rehabilitación y reconstrucción de las áreas afectadas, que será de obligatorio cumplimiento por todas las entidades públicas o privadas que deban contribuir a su ejecución”.
Según esta Ley 1523 de 2012, una vez declaradas situaciones de desastre, el gobierno podrá dictar medidas especiales de contratación, ocupación temporal de inmuebles, adquisición de predios, transferencia de recursos, créditos para afectados y otras medidas tendientes a garantizar el regreso a la normalidad.
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El decreto, también le permitirá al gobierno “acumular recursos que no están siendo ejecutados en este momento para priorizarlos en la atención a damnificados. Tanto en atención en emergencia, pero también en lo que sería la recuperación de estas regiones apenas pase el inverno”, afirmó por su parte, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad.
Crisis invernal
Los datos presentados por la UNGRD este 31 de octubre muestran que las situaciones de riesgo o emergencias en lo que va del año, han dejado un total de 203 fallecidos, 281 heridos, 37 desaparecidos y 453.292 personas afectadas, representadas en 136.407 familias.
Solo en este último fin de semana, las lluvias provocaron la creciente súbita del río Quilcasé, que provocó el colapso de un puente que conectada por lo menos a cuatro poblaciones del Cauca; también se desbordó el río Anchicayá, el cual ocasionó inundaciones en comunidades del departamento del Valle Del Cauca.
Hacia el centro del país, las lluvias de los últimos días generaron el desbordamiento de cuerpos de agua que afectaron zonas rurales de los municipios de La Mesa y Granada, en Cundinamarca. Así mismo, varias zonas rurales del municipio de San Miguel de Serna, en Boyacá, quedaron inundadas el domingo, afectando la actividad agrícola y ganadera en esta zona del país.
Otro ejemplo de la crisis invernal que vive el país es la alerta generada en el municipio de Mompox, Bolívar, en donde el nivel de las aguas del río Magdalena está a 33 centímetros de alcanzar la altura de la creciente que se presentó en el año 2010 y que dejo 6.529 familias damnificadas.
En este mes de noviembre, de acuerdo con el Ideam, va a haber incremento de lluvias muy importante en varias zonas. En la costa caribe, en la zona andina y en la zona pacífica, donde esas lluvias podrían ser muy grandes.