Diferendo limítrofe con Venezuela sigue lejos de solucionarse, según analistas

Luego de la derogación del decreto unilateral emitido por Venezuela que buscaba fijar los límites marítimos del país vecino, expertos aseguran que se abrió también la puerta a que representantes de alto nivel de ambos países retomen el diálogo para dirimir el diferendo limítrofe.

Aunque la derogación del decreto unilateral que emitió el gobierno venezolano calmó la discusión en torno a los límites fronterizos con Colombia, se abrió también la puerta a que representantes de alto nivel de ambos países retomen el diálogo para dirimir el diferendo limítrofe. 

Así quedó claro luego de que el presidente Nicolás Maduro fijara un nuevo decreto en el que las Zonas Operativas de Defensa Integral Marítima e Insular, ya no solo responden a un orden militar y defensivo, sino en materia de desastres naturales, calamidades y delitos nacionales y trasnacionales.

Además éste no involucra coordenadas de zonas pendientes por delimitar con Colombia, tal como lo solicitó en una nota de protesta la Cancillería colombiana. 

De acuerdo con Ronal Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, la importancia del ‘reversazo’ de Maduro radica en la creación de una Comisión Presidencial para asuntos limítrofes que mantendría abierto el diálogo con Colombia.

Sin embargo, advierte que la creación de estos organismos de alto nivel ya son “cuento viejo” en el vecino país, pues son medidas que se anuncian cada que se presenta algún problema de orden social o económico. 

“Eso, en la realidad política de Venezuela, no significa mayor cosa. Siempre crean comisiones de muy alto nivel con funcionarios de muy primera línea, incluso algunas encabezadas por Maduro. Son comisiones en las que se dan varios asuntos a tratar pero que no terminan en nada y en el caso de la delimitación fronteriza lo más seguro es que se congele, como en años anteriores”, dijo el experto Rodríguez. 

Esta tesis toma fuerza en algunos sectores políticos colombianos, que aseguran que tanto la institución militar, como la opinión pública venezolana, se negarán a ceder un milímetro de territorio en medio de una negociación con Colombia. 

“Esa ha sido la piedra en el zapato de las negociaciones que llevan más de cuarenta años, los venezolanos nunca lo van a aprobar. Por eso la derogación del decreto no garantiza que se dé una delimitación definitiva, sino que se revive la discusión por las vías diplomáticas y evita que en el futuro Venezuela pueda reclamarle este territorio a Colombia”, aclaró Rodríguez. 

Por esto, en opinión de expertos, la discusión deberá asumirse como un tema de Estado y no de gobierno. Es decir, deberá pensarse en una decisión que sirva en el largo plazo. 

Una de las posibles salidas es delegar a una sola persona que, encabezando o no, una comisión encargada al diferendo limítrofe, sea la cara visible de la negociación, como lo fue hasta el 2009 el abogado Pedro Gómez Barrero.

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“Los diálogos ahora tendrán que esclarecer un asunto que está estancado hace seis años, cuando se disolvió la comisión negociadora, pero no puede haber una visión cortoplacista, el diferendo seguirá vigente y para rato”, concluyó el analista.