Analistas dicen que elecciones y proceso de paz son un tema indisoluble

El ministro del Interior, Aurelio Iragorri, dijo que el país decidirá entre una salida negociada a la paz o la guerra.

Por más que los analistas no logren ponerse de acuerdo en si el mejor camino para las negociaciones entre el Gobierno y las Farc es suspender, cancelar o seguir adelante con los diálogos mientras avanzan las elecciones del 2014, de lo que nadie duda es que el proceso de paz será el hilo conductor en esta campaña.Tal como ocurrió en las presidenciales del 2002, cuando el entonces candidato Álvaro Uribe Vélez interpretó la desesperanza de los colombianos tras el desgastante proceso de paz del Caguán y se impuso con la promesa de buscar una salida militar, creen los analistas que el país enfrenta una disyuntiva similar.Para el experto en seguridad John Marulanda, la paz va a ser el tema central en esta contienda e irónicamente serán dos caldenses los que defenderán las distintas orillas. “Por un lado el candidato uribista Óscar Iván Zuluaga, quien ya anunció que suspenderá los diálogos, y por el otro Humberto de la Calle defendiendo el esfuerzo del Gobierno”.“Si las Farc no hacen un gesto de paz o un anuncio que cambie el panorama político, este proceso jugará en contra del Gobierno y el descontento de los colombianos favorecerá al uribismo y volveríamos a un mandato que intente someter a las Farc por la fuerza; y créame que el Estado tiene las herramientas técnicas para lograrlo, pese a que haya dado un paso atrás con la caída del fuero militar”, aseguró Marulanda.El también especialista en seguridad y politólogo Alfredo Rangel cree que es absolutamente inevitable que el tema de los diálogos de paz en La Habana esté en el centro del debate en la coyuntura actual, aunque considera que la disyuntiva de los colombianos no es la de optar por el camino del diálogo o la vía militar.“Nadie en Colombia ha planteado la vía militar como exclusiva o excluyente del dialogo para lograr la paz. La real disyuntiva es: paz con impunidad o paz con justicia. La negociación de la agenda nacional con los terroristas o negociar la desmovilización, la reinserción y el desarme”, explicó Rangel.En cualquier escenario, dicen los especialistas, es claro que buena parte de lo que ocurra en las presidenciales del 2014 depende de que un sector sepa defender el proceso de paz y los diálogos como la verdadera alternativa para la paz, o que los detractores de La Habana logren aprovechar el descontento que va sumando el país con unas negociaciones que parecen estancadas y que no han dado muestras claras de que puedan llevar a detener cinco décadas de conflicto.Sin medias tintasLa alternativa no parece ser otra. Ayer el propio ministro del Interior, Aurelio Iragorri, aseguró ante el Congreso que el proceso de paz marcará el desarrollo de las elecciones, por lo que advirtió que serán los colombianos quienes decidan entre una salida negociada o la guerra como alternativa para llegar a la paz. “Las elecciones se van a definir entre quienes apoyan el proceso de paz y una salida negociada al conflicto, que ojalá se logre, y entre quienes piensan con todo derecho que la salida es la guerra. Serán los colombianos los que decidan cuál es la salida que prefieren”, dijo Iragorri.Al respecto, el exministro Camilo González Posso aseguró que lo dicho por el Ministro “es la realidad insalvable”. “Esos son los términos de la encrucijada, donde hay una propuesta que se alínea con una salida política negociada y otra que apuesta a desmontar el proceso e irse a la guerra; no hay más opciones porque pase lo que pase en La Habana esa disyuntiva ya estaba marcada”.Ante este panorama, algunos analistas creen que esto cierra la opción a una tercería en el país, como ocurrió en el 2010 con el Partido Verde, porque en el tema de paz solo hay blanco o negro.“No veo que exista una tercera vía porque desafortunadamente son las únicas opciones que hay y esa es una realidad contundente”, dijo González Posso.