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Se abre el debate por entrega de kits de consumo a heroinómanos

Aunque se ve como positiva la implementación del plan piloto, expertos dicen que hay que trabajar más en temas de trabajo social y salud pública.

23 de diciembre de 2015 Por: Redacción de El País

Aunque se ve como positiva la implementación del plan piloto, expertos dicen que hay que trabajar más en temas de trabajo social y salud pública.

En Cali se necesitan más programas para prevenir el consumo de heroína. A esa conclusión llegaron diferentes autoridades y actores sociales consultados por El País, frente a la entrega de kits de consumo para heroinómanos, anunciada por la Secretaría de salud Municipal.

Aunque se ve como positiva la implementación del plan piloto, que arranca en enero de 2016 con personas del barrio Sucre, en el centro de Cali, los expertos dicen que hay que trabajar más en temas de trabajo social y salud pública. 

Padre José González, director de Samaritanos de la Calle

“Este piloto es muy importante. El ideal sería que estas personas no tuvieran que recurrir a la heroína pero hay consumidores en las calles del Calvario o Sucre alquilando jeringas para inyectarse, por eso es un punto muy positivo que les den estos insumos para que ellos por lo menos  puedan hacerlo y no se hagan un daño mayor por enfermedades infectocontagiosas como el VIH. Me parece, en principio que para los habitantes de la calle es muy bueno, porque la heroína es de las drogas  más destructoras porque tiene  daños absolutamente irreversibles. Ahora, lo que también se debe propiciar es un plan de prevención  para que la gente no se meta en el consumo de heroína, tal como sucede con  el licor y la marihuana ”. 

Harold Alberto Suárez, secretario de Salud de Cali

“Lo que se pretende desde la Secretaría de Salud es minimizar el riesgo de que las personas consumidoras de heroína se contagien de enfermedades como el VIH y la Hepatitis C, además de otras enfermedades. Queremos reducir los contagios en un 100 % y que estas personas hagan parte del sistema de salud.  Se ha visto en países desarrollados como Estados Unidos e Inglaterra que cuando se implementan estas políticas se disminuyen  los contagios. No se busca incrementar el consumo sino que se eviten los altos costos de un tratamiento por enfermedades infectocontagiosas, que en el caso del VIH, cuesta cerca de $1.500.000 mensuales. Con este plan piloto  el costo por  atención de una persona mensualmente oscila entre $100.000 y $200.000”.

Lea también: Nace una nueva esperanza para adictos a la heroína en Cali

Julián Quintero, Líder plan piloto

“Un estudio del Ministerio de Justicia, realizado en 2012, ubica a Cali como la ciudad con mayor número de personas que intercambian jeringas para consumo. También tiene el promedio de edad más joven en consumidores de heroína. El 2 % de las personas infectadas con VIH en Cali son consumidores de drogas inyectables. Se busca reducir los contagios de  enfermedades  infectocontagiosas por jeringas usadas. Ellos no  se podrán inyectar la heroína en el sitio porque el espacio no está pensado así,   como sí lo hay   en Vancouver, Canadá, el único en América”. 

Andrés Santamaría, Personero de Cali

“Es un paso importante porque en otras partes del mundo ha dado resultados positivos y creo que Cali lo está dando. Puede haber una mejoría para esta población en el papel de salud pública pero no va a combatir los problemas de realidad y pobreza que todavía tiene la población habitante de calle en Cali. Quedan tareas pendientes por resolver como sacarlos de la calle y reintegrarlos a una vida normal. Este plan piloto debe ser articulado también con otras instituciones del Municipio que puedan ayudar en la atención”.

María F. Ortiz, Corporación Caminos

“Me parece importante en términos de salud pública. No se puede plantear como una acción que va a solucionar el consumo de esta sustancia pero sí será una mitigación. Se deben implementar otras acciones para enfrentar la situación y que el consumo no se incremente en una forma siginificativa, no solo en la ciudad sino en el país. Es importante revisar cómo está el plan de salud para esta población, qué tanto está funcionando la atención en rehabilitación y qué programas se están adelantando de prevención de consumo”.

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