Robi Draco electrizó a los caleños con su música

Horas antes de su concierto en el centro de eventos Alférez Real, el cantante recorrió las calles de Cali, visitó la Plaza de Cayzedo y almorzó en un restaurante al norte de la ciudad.

Faltando cinco minutos para las doce de la noche del sábado, igual que la canción, llegó el climax. Los gritos de los cientos de asistentes al centro de eventos Alférez Real, en el oeste de Cali, no fueron suficientes para ahogar los acordes de la guitarra plateada del músico puertorriqueño Robi Draco Rosa quien visitó la capital del Valle con su gira del 2010 Vagabundo por el Mundo.La espera ya había completado, para algunos, siete horas ininterrumpidas. Pero todo señal de cansancio o del hastío de la impaciencia se borraron cuando el artista entonó las notas de una de las canciones de su más reciente álbum, Amor Vincit Omnia.Enfundado en una chaqueta de pana, con gafas oscuras y acompañado de un variopinto grupo de músicos, Draco Rosa empezó lo que para algunos asistentes es el mejor concierto de rock que se ha presentado en Cali en este último año. El montaje de luces, sonido y video que trajo el artista fue de una calidad inigualable. Después de dos canciones el puertorriqueño saludó a Cali y prometió un show sin precedentes "sólo porque estoy aquí y esta ciudad lo merece".Y aunque cualquiera diría que se trata de una de las frases obligadas de los cantantes cuando visita una nueva urbe, en el caso de Draco Rosa parecía no ser tanto protocolo y más una verdad de a puño ya que pasó el día recorriendo las calles de la Sultana.Al cantante se le vio en la Plaza de Cayzedo, recorriendo la plazoleta de los poetas y comiendo en un restaurante del norte de la ciudad. Según explicaron los organizadores del evento fue idea suya salir a conocer Cali después de que alguien le obsequiera una copia de Qué Viva la Música, obra literaria del escritor caleño Andrés Caicedo.Después de saludar a un público eufórico que no paraba de corear su nombre y de gritarle "gracias, gracias por venir", Robi volvió a su pasado musical y cantó Vagabundo, de su álbum homónimo. Una versión que sin duda dejó en evidencia la calidad de todos sus músicos, quienes a la par con él dieron una lección de buena interpretación musical, pasión y buena energía.El concierto del autor de clásicos como Penélope, Cruzando Puertas y la erótica Te Fumaré, estuvo acompañado por imágenes de películas clásicas del cine mundial como El Ciudadano Kane y por algunas imágenes hechas por él mismo en sus recorridos por el planeta.Luego de una hora y veinte minutos de repasar su repertorio musical, Robi se despidió con la promesa de regresar pronto a Cali. Pero, antes improvisó los acordes de su Cruzando Puertas, una canción que dice ya no tocar en vivo. "Estaba almorzando en un restaurante de acá de Cali y la oí de nuevo. Ya no recuerdo cómo va pero intentaré", dijo el cantautor antes de corear algunas estrofas acompañado del público del Alférez Real. "No, ya no la recuerdo", dijo y después se despidió, dejando en el aire un halo de trance y satisfacción entre los asistentes y dejando implícito que su regreso a esta ciudad no tardará tanto.