¿Qué va a pasar con los semáforos de la Avenida 2?, se abre el debate

La medida, que busca mejorar los desplazamientos de los peatones, será revisada por la Secretaría de Transito dada la congestión vehicular que se posa frente al CAM.

Desde su instalación, hace dos meses, los semáforos peatonales ubicados sobre la Avenida 2N (frente al CAM y Bellas Artes) generaron polémica entre los conductores que a diario se movilizan por este corredor vial que conecta el norte con el sur y el oeste de la ciudad.

El pasado martes los aparatos fueron activados, lo que generó gran congestión vehicular durante el día, opiniones pididas entre peatones y conductores de vehículos particulares e, incluso, que el secretario de Tránsito, Alberto Hadad, anunciara la revisión de la medida.

El funcionamiento de los semáforos hace parte del Plan Integral de Movilidad Urbana, PIMU, el cual busca mejorar la movilidad, principalmente de peatones, en el centro de Cali; y contempla remover los puentes peatonales que hay sobre la Avenida 2N para dar paso a la construcción de pompeyanos (pasos peatonales a nivel de la vía).

De acuerdo con los estudios del PIMU, sobre la Avenida 2N con Calle 12N, por ejemplo, se mueven diariamente 11.600 peatones (entre las 6:00 a.m. y 6:00 p.m.); sobre la Calle 13N, el número es mayor, 2561 peatones, en el mismo periodo de tiempo.

Asimismo, en este tramo de vía el 66 % de los viajes los  hacen vehículos motorizados (automóviles y motocicletas), lo que indica que en horas pico pueden circular 3250 vehículos a la altura de la 2N con 12N.

Opiniones:

Alberto Hadad, secretario de Tránsito de Cali

En este tema hay que tener mucho cuidado y lo estamos mirando con mucho detenimiento, pues el martes prendimos los semáforos y hubo un trancón impresionante. Estuvimos hablando con el Alcalde sobre el tema porque cuatro semáforos en menos de 500 metros tienen que ser revisados. Vamos a tener que trazar unas cebras y, así como lo hago manualmente en las horas pico, poner tres o cuatro guardas. En las ceibas del CAM, que es el sitio por el que pasan las personas con discapacidad, se va a parar el tráfico mientras cruza la gente y después se suelta. Ese tema que hay que mirarlo con mucho tino porque la Avenida 2 es una vía muy rápida, es de las únicas entradas que tiene la ciudad y empata con otras arterias viales. Tengo que poner en contexto al Alcalde y al Secretario de Infraestructura de ver la bondad o no bondad del proyecto. Janeth Mosquera, experta en movilidad Siento que el Secretario de Tránsito está más interesado en asuntos de congestión vehicular que en preocupaciones por el ciclista o el peatón, lo que puede ocasionar que en vez de avanzar hacia la  pacificación del tránsito se le siga dando prioridad al transporte motorizado. La  congestión que se puede generar en ese corredor vial es máximo de un minuto y medio o dos, pero detrás de eso está la protección de la vida y la movilidad de muchas personas; allí hay un análisis de costo beneficio y vale la pena que se pregunten: con el retraso del tráfico ¿cuántas vidas estoy salvando? Aquí no hay que hacer muchos análisis ni estudios, lo que se necesita es determinar si el peatón va a ser la prioridad y tomar decisiones para favorecerlo, independientemente de los actores viales que se afecten. William Vallejo, asesor en movilidad Hay que pensar en la prioridad de los usuarios de la calle, que son las personas que van a pie y son las más vulnerables, para que tengan unos cruces seguros, directos y cómodos hacia sus destinos. Obviamente que los primeros días de la medida va a haber congestión, porque el conductor no está acostumbrado a esos cambios y muchos de ellos no los esperan. Una medida así requiere que los conductores tengan un periodo de adaptación y no puede ser menor de 90 días, en los cuales ellos van a buscar otras rutas, el tráfico se empieza a regular a través de semáforos, empiezan a haber cambios en los patrones de desplazamiento y, máximo, a los 120 días de ser implementada la medida, el tráfico empieza a fluir de la manera que debe hacerlo. Esta disposición lo que hace es solucionar la segregación del peatón y recortar la distancia de cruce de niños y ancianos, además de incluir a las personas con movilidad reducida. Ese cambio debe durar por lo menos un año, en el que se tomen datos para evaluar las condiciones del antes y el después, para tomar una decisión sobre si la medida es contraproducente o no. Evaluar su efectividad con datos de dos o tres días, me parece que no es apropiado. Ómar Cantillo, secretario de Infraestructura de Cali Esto era para hacerlo de  martes a viernes. Los primeros dos días con los puentes cerrados, haciendo los conteos a lo largo del área de influencia de los semáforos para ver cuántas personas estaban pasando, a qué velocidad y tratando de ajustar las fases de los semáforos para ajustarlos en ola verde. El martes pudimos ver que los peatones estaban contentos, los carros no tenían problema y fluyeron normalmente, a excepción de cuando se presentó un accidente a las 3:00 p.m. cerca a Bellas Artes  y causó traumatismo, pero se solucionó. Hay que entender que el peatón es el rey y podemos inducir a que los conductores utilicen otras vías para disminuir la cantidad de vehículos que pasan por el CAM y los que tomen la Avenida 2, lo hagan a 40 kilómetros por hora. Lo que estamos haciendo obedece al cumplimiento de una acción popular que demanda la garantía del paso de personas con discapacidad, por eso tenemos que sentarnos con el Secretario de Tránsito para que visualice el tema desde todos los ángulos y coordinemos todo para que la medida funcione. En el diseño del parque lineal río Cali, que está en licitación, esta vía tiene una integración peatonal importantísima y parte de este ejercicio es que los conductores empiecen a pensar en los tramos de largo aliento y busquen otras vías.