Los estragos que dejó la temporada de invierno en Cali y Valle

Aunque ya se levantó la alerta máxima para Cali y parte del Valle, luego de que el río Cauca bajara su nivel considerablemente, las huellas que dejaron las lluvias registradas a comienzos de este mes y las inundaciones que tuvieron la mayoría de los municipios del departamento preocupan a los ciudadanos. Cultivos anegados, viviendas desgastadas por la humedad y problemas de salud se evidencian al darse un paso por algunos sectores afectados tras la emergencia invernal.

San Pedro y Buga siguen presentando riesgo de inundación, según la Secretaría de Gestión del Riesgo del Valle, pues sus diques son los más debilitados. “Los diques vienen debilitados por daños sufridos o por falta de mantenimiento. Ayer hubo una ruptura en San Pedro”, dijo Marcela Navarro, coordinadora de manejo de desastres de la Secretaría de Gestión del Riesgo del Valle.

“Iniciamos una etapa de atención a la comunidad. Ahora hicimos la solicitud de unos ‘sacos de polipropileno’ que es el material encargado de darle fortalecimiento a los diques del Departamento. Necesitamos alrededor de 40.000”, manifestó la funcionaria.

En su último informe de pronósticos y alertas, el Ideam incluye a Yotoco en ‘alerta roja’ por la persistencia del alto nivel del río Cauca.

La ola invernal dejó en todo el Valle 1376 familias ‘víctimas’ de las precipitaciones, sin contar a Cali, donde 1422 familias resultaron damnificadas. Además, en 36 municipios se presentaron deslizamientos e inundaciones por fuertes lluvias, de los cuales 18 se vieron afectados directamente por la creciente del río Cauca. El cultivo que más sufrió fue el de caña.

De acuerdo con la CVC, el caudal del río Cauca llegó ayer a los 582 metros cúbicos por segundo, muy por debajo de su cota crítica de desbordamiento (1100 metros cúbicos por segundo).

Las zonas que requieren mayores ayudas humanitarias son Cerrito, Buga, Florida, San Pedro y el Águila, según Navarro. En el Valle, sin contar Cali, se han otorgado 1376 kits de aseo a las familias.

El plan de contingencia de esta Secretaría de Gestión de Riesgo del Valle es aprovechar la disminución del caudal del río Cauca para proteger las estructuras de las viviendas y de los diques.

Por su parte, Rodrigo Zamorano, secretario de Gestión del Riesgo de Cali, dijo que “el balance en general es bueno. El río Cauca cada día continúa bajando más y seguimos atendiendo a las familias del Jarillón y del oriente de la ciudad. Se están haciendo fumigaciones diarias para combatir el zancudo”.

La Secretaría de Salud, por su parte, reporta menos brotes de piel en las personas y recomienda no tener contacto con el lodo y el barro, para evitar nuevas afectaciones.