Lío financiero afecta a empresas de recaudo del MíO

La firma de seguridad Atempi, que presta la vigilancia de las estaciones del MÍO, embargó a uno de los socios de la UTR&T (que recauda los pasajes del sistema) por no cumplir con sus obligaciones contractuales.

Un total de $6.000 millones pretende cobrar la empresa de seguridad Atempi, a través de la vía jurídica, a la Unión Temporal Recaudo y Tecnología, UTR&T, entidad que maneja el sistema de recaudo de los pasajes del MÍO.Las acreencias corresponden, según versiones no oficiales de Atempi, “a los servicios de vigilancia de las estaciones del sistema, al no pago de algunas obligaciones de seguridad social, así como a los gastos por ausencia de servicios públicos y de baños en dichos lugares”.“Nos vimos obligados a tomar esta medida por los continuos aplazamientos en el pago por los servicios de seguridad que prestamos a la Unión Temporal”, le dijo un empleado del área jurídica a reporteros de este diario.El País intentó conocer la versión oficial de Atempi, pero desde la oficina principal de Medellín informaron que el único autorizado para hablar del tema era el presidente de la compañía, Gustavo Jauregui Navarro, quien se encuentra fuera del país y regresa la próxima semana.Sin embargo, un portavoz autorizado de Atempi dijo que “si bien adelantamos la reclamación estamos abiertos a llegar a un feliz acuerdo y esperamos lograr una negociación pronta”.Beatriz Hoyos, vocera de la UTR&T, explicó que “debido a los retrasos que ha sufrido la operación del MÍO por la falta de compromiso de los anteriores gobiernos, los ingresos estimados no se han cumplido, razón por la cual la Unión Temporal se colgó en el pago de algunos proveedores, entre ellos la empresa de seguridad Atempi, pero están negociando la forma de ponerse al día”.“No entendemos que una negociación entre privados se divulgue en los medios. Pero la empresa informa que el MÍO no se verá afectado pues Atempi sigue prestando el servicio de seguridad mientras llegamos a un feliz acuerdo”, dijo Hoyos.Sobre la operación y el recaudo del masivo, Hoyos aseguró que “no afectará su normal desarrollo; nuestro punto de equilibrio son 550.000 pasajeros al día y hoy vamos en 460.000”, el embargo solo cubre a tres de los cincos socios de la UTR&T, quienes rechazan el valor planteado.