El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Cali

Artículo

Las tareas de los hospitales universitarios en tiempo de crisis

Cada vez hay menos instituciones donde se forman los nuevos profesionales de la salud y varias están en crisis, lo que repercute en la preparación académica. Expertos opinan.

12 de diciembre de 2015 Por: María Teresa Arboleda Grajales | Reportera de El País.

Cada vez hay menos instituciones donde se forman los nuevos profesionales de la salud y varias están en crisis, lo que repercute en la preparación académica. Expertos opinan.

En Colombia cada vez son menos los hospitales  universitarios, aquellos  que funcionan como  aula de clase de los estudiantes de las carreras de la salud, donde hacen investigación y se forman como profesionales.   Lea también: No cesa la crisis en el Hospital Universitario del Valle, este es el panorama

“El  modelo de enseñanza desde hace muchísimos años- y Univalle fue innovadora- es  práctico: los estudiantes aprenden haciendo”, explica el  rector del alma máter, Édgar Varela Barrios. 

Cabe recordar que Univalle y el Hospital Universitario del Valle, HUV, trabajan estrechamente  desde 1956, y esa relación los hace casi una sola institución, siendo  jurídicamente independientes, explica   el decano de la Facultad de Salud, Gerardo Campo.

Además de escasas, estas entidades con vocación docente, como el HUV, afrontan crisis económicas, lo que  preocupa a padres de familia y a los estudiantes, al no poder hacer las prácticas en forma regular.

Esta situación ha comprometido la formación de los profesionales de la salud que se encuentran operando dentro de ellos. Así lo expresa el médico  Carlos Eduardo Montes Cardona, egresado de pregrado en medicina y cirugía de la Universidad del Valle y quien hace  una especialización en urología en la misma institución.

“Hablando puntualmente del HUV, la situación parece ser mucho más crítica, pues el problema de fondo nos afecta de forma cíclica, esta última vez con mayor intensidad, dificultando una práctica adecuada y necesaria para nuestra formación”, complementa. 

Dado que estas  dificultades se dan en todo el país, la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud- FUCS, junto con sus dos instituciones, el Hospital de San José y el Hospital Infantil Universitario de San José, proyectan realizar el  Primer Foro en Colombia ‘Hospitales universitarios y sistema de salud, una  convergencia por la sostenibilidad del sistema’. En este escenario le   plantearán  al Gobierno Nacional dicha  problemática, que de una u otra manera afecta a cerca de 60 facultades de medicina que hay en el  país y a los demás pregrados y posgrados del área de la salud a nivel nacional.

Uno de los conferencistas  será el médico ginecobstetra   Jorge Gómez Cusnir, presidente de la Sociedad de Cirugía de Bogotá - Hospital de San José, quien también expondrá la inquietud del sector por las condiciones que tendrán que cumplir desde enero próximo los hospitales con vocación universitaria, entre ellos, la acreditación de alta calidad.

“Esto conlleva  una enorme inversión en dinero, pero también tendrán que hacer reinversión en tecnología de punta, en capacitación y competencia de sus docentes”, sostiene el galeno. 

Al respecto, Oswaldo Barrera Guaque, director (e) de la Dirección de Desarrollo de Talento Humano en Salud, del Ministerio del ramo, le dijo a El País que el plazo para que estos hospitales  cumplan con los requisitos que exige la Ley 1438 del 2011 se amplió hasta el 31 de diciembre de 2016, conforme al artículo 84 de la Ley 1769 de 2015, que decreta el presupuesto general de la Nación para el 2016.

Sobre este punto, Carlos Montes señala que como estudiantes están dispuestos a participar en ese proyecto mientras sea posible. “Pero no creo que en este momento sea un tema de discusión, partiendo de que aún no terminamos de salir de la crisis”. 

Aprendizaje continuo

Aunque los estudiantes de la Universidad Santiago de Cali no tienen dificultades para realizar sus prácticas, el decano de la Facultad de Salud,  Jefferson Ocoró, reconoce que  la situación de muchas instituciones médicas  va en sentido contrario a lo que buscamos en la academia, y es que haya continuidad en el aprendizaje.  “Nosotros somos la parte más débil de la cadena, eso es lo que ocurre con los programas de medicina cuando hay  crisis, en lo último en que se piensa es en el perjuicio que esto ocasiona para  la formación del nuevo talento humano, porque se suspenden las clases y el  estudiante se desconecta”.

Algo similar les ocurrió a 400 estudiantes de la Universidad Libre Seccional Cali, cuando este año se suspendió el semestre debido al cierre de la Clínica Rafael Uribe Uribe que, aunque no es universitaria, sí funciona como tal desde hace 30 años.  Alfonso María Valencia Caicedo es el    decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de Unilibre. Él confía en que a mediados de febrero estará operando normalmente.  De todos modos,  conservarán los convenios con la Clínica Santa Clara de Bogotá, el  hospital San José de Buga y varias entidades caleñas “porque es bueno que los jóvenes conozcan otra cara de la moneda distinta a la clínica”. Dichos  convenios fueron el plan alterno que impidió que la afectación fuera mayor. “Hubo que suspender clases  y explicarles que no era culpa de la Facultad”, añade el decano. Por esto hubo  protestas  dentro del alma máter,  pues “fue caótico desde el punto de vista  académico,  ético y humano”, señala una futura médica de Unilibre que omitió su  nombre.   Otro proceso difícil lo vivieron estudiantes de la San Martín Cali, debido a los ya conocidos problemas a nivel nacional, pero todo funciona normal y en enero terminarán semestre, indica una de las estudiantes. La  institución tiene 17 convenios entre los cuales están con  el Hospital Isaías Duarte Cancino y el San Juan de Dios, dice Juan De Dios Villegas Perea,  decano de la Facultad de Medicina. De acuerdo con Villegas, “los hospitales y clínicas universitarios deben recibir un trato distinto, por la formación que imparten, que implica costos, gastos, una forma de organización diferente en lo asistencial y administrativo y mayor personal e insumos”. Hay dos  aspectos que deben marchar a la par, según explica: “por un lado, la población tiene derecho a atención en salud digna y oportuna, y por el otro,  los estudiantes tienen que tener  una adecuada formación, pues la meta es sacar muy buenos profesionales de la salud”. En esto  coincide el rector de Univalle, al señalar que se ha propuesto que haya una ley propia para los  hospitales universitarios públicos. Pero  hay que reconocer que también hay aspectos positivos.  “Tenemos una gran fortaleza respecto a la gran mayoría de universidades del país y es contar con un hospital  de tercer nivel en convenio, donde se desarrolla el 90 % de las  27 especialidades médicas, mientras que en otras regiones los estudiantes tienen que repartirse en varias  clínicas”. Esa concentración de una universidad con un hospital casi que exclusivo nos da una ventaja competitiva en términos  educativos, explica Gerardo Campo, de Univalle. Agrega que “nuestros médicos  salen con unas competencias que les permiten la resolución de problemas. En el primer mundo usted puede tener egresados sin haber establecido un contacto individual y personalizado con un solo paciente, cuya formación la hacen  sobre equipos  de simulación, en clases teóricas,  mientras que en nuestro país puede encontrar gran variedad de escenarios de  aprendizaje.Además de superar la crisis, hay otras tareas pendientes en el HUV para mejorar las condiciones académicas. “Parte de los problemas que tenemos que resolver es dotarlo de equipos e infraestructura científica del más alto nivel para que los estudiantes  puedan tener prácticas también de alto nivel”, puntualiza el rector de Univalle.

 

Proceso con los  conveniosLas universidades  pagan a las instituciones médicas para que sus  estudiantes realicen sus prácticas allí. En el caso de Unilibre,  además de remunerar  a los docentes, cancela el 30 % del valor de la  matrícula a las instituciones. Así por ejemplo, si esta cuesta $10 millones, se pagarán $3 millones. En algunos casos el pago se hace en especie, con equipos médicos. Hay especialidades por las que se paga más, en tanto que algunos hospitales tienen un monto fijo haya o no estudiantes.De otro lado,  la Universidad Santiado de Cali, en conjunto con el Hospital San Juan de Dios, construyó  un complejo universitario   para el bienestar de los estudiantes, el cual facilita  que tengan un centro de estudio adecuado para sus requerimientos y para que “vivan nuestros  internos y nuestros futuros residentes, toda vez que el próximo año ofertaremos especialidades médico quirúrgicas”, anunció el decano de la Facultad de Salud, Jefferson Ocoró.

‘Aulas’ de los médicos

Estos son solo  parte de los  sitios donde se hace docencia-aprendizaje:Alrededor  de 270 estudiantes tiene la Icesi, los cuales realizan prácticas en la Fundación Valle del Lili, Comfandi, Empresa Social del Estado, ESE, de Ladera y del Centro y la Fundación Propal en Puerto Tejada, afirma  el director del programa de medicina, César Guevara. En la Facultad  de Salud de la  Santiago de Cali hay   5000 alumnos, constituyéndose en la más grande del Suroccidente. Se realizan prácticas en diversas entidades. Tienen un convenio muy fortalecido con el Hospital San Juan  de Dios.  Univalle,  además del  HUV, tiene  34 convenios en  clínicas privadas de Cali, con la red pública de hospitales del departamento y del municipio.En la Javeriana Cali  se practica desde primer semestre en un proceso creciente de complejidad, lo cual permite desarrollar habilidades y destrezas para poderse desempeñar adecuadamente en los diferentes niveles de atención, tanto de baja, mediana y alta complejidad. El Hospital Infantil Club Noel, el Instituto de Niños Ciegos y Sordos, las clínicas Farallones y  Amiga de Comfandi y el Hospital Universitario San Ignacio de Bogotá, figuran entre las aulas de los javerianos.

AHORA EN Cali