"La idea de la 'ley seca' es salvar vidas": Directora de Cisalva

María Isabel Gutiérrez, directora del Instituto de Investigación y Desarrollo en Prevención de la Violencia y Promoción de la Convivencia Social, Cisalva, piensa que a los caleños les hace falta hacerse responsables por sus acciones.

Tras los desmanes y muertes que se presentaron luego del segundo partido de Colombia, la Alcaldía decidió aplicar una serie de medidas para las celebraciones mundialistas, entre ellas, ‘ley seca’. la Para María Isabel Gutiérrez, directora del instituto Cisalva, son restricciones necesarias en una sociedad sin control. Piensa que hace falta educación en valores, tanto en la familia como en los colegios, para que sean los mismos ciudadanos quienes regulen sus propias acciones.¿Cuál es el impacto real que ha tenido la ‘ley seca’ para los partidos?Comparando el segundo partido, cuando no hubo ‘ley seca’, con el tercero, la reducción en accidentes de tránsito fue de alrededor de un 95 %. También disminuyeron la embriaguez, las riñas y los indicadores de problemas de convivencia. Estas medidas son necesarias cuando hay un grupo de ciudadanos que no se controla, porque uno no dice que la gente no celebre, pero que lo haga con responsabilidad. No es exigirles mucho, sino que cumplan con unas normas básicas de convivencia.Pero, ¿esta medida deja un aprendizaje para la gente? O vamos a tener ‘ley seca’ siempre que haya una celebración...Esta es una medida que uno llama ‘de choque’. Se ha demostrado que este tipo de regulación no genera una sostenibilidad ni un cambio de cultura ciudadana. Se necesita más que eso. La idea de la ‘ley seca’ es salvar vidas: proteger la vida es un lema importante de esta Alcaldía. Y esto no pasa solo en Colombia, porque recordemos a los ‘Hooligans’ en Inglaterra, que es la misma expresión histérica. Se trata de aprender a respetar al otro. Hay que civilizarnos.¿Cómo han logrado superar este problema en otros países?En las sociedades escandinavas, sociedades incluso más maduras, se ha dado este problema, pero ahora uno ve que la cultura está desde la familia, desde que el niño nace. Uno ve que cuando van a ingerir licor nunca llevan los carros o si los llevan saben que hay una persona que no se toma siquiera una copa. Y eso está en la misma cultura. Pero han pasado muchos años para que lleguen hasta ese punto. Un ejemplo más criollo, para no ir tan lejos, es el de Bogotá, que generó Mockus y se preservó durante doce años. Pero como hay gente nueva que llega a la ciudad y que no está en la misma línea, se generan situaciones como los diez muertos que hubo por la celebración de los partidos.¿Por qué con el fútbol se generan estas reacciones y, en ocasiones, la ola de violencia? Nairo ganó el Giro de Italia y, aunque la gente se alegró, el país no se revolucionó...No es que sea el fútbol el que genera esa reacción. Estas acciones se pueden catalogar, de acuerdo con los científicos que investigan el tema de salud mental, como ‘ondas histéricas’, que generan actividades y acciones desmedidas, que van a redundar en una lesión hacia la misma ciudadanía. Se convierten en expresiones histéricas, que cuando no existe un control personal ni unas reglas de tolerancia y me echan espuma o harina, o me tocan la moto, como sucedió aquí en Cali, yo reacciono mal. Y si estoy armado y alicorado, peor. Por eso ningún ciudadano debe estar armado. El hecho de tener un arma con uno o en su familia, genera una probabilidad de que uno muera por esa arma de 20 veces más a que no la tuviera. ¿Ha faltado educación por parte del Estado?Las autoridades toman unas medidas de control, pero la responsabilidad es de las familias, de cada uno de nosotros. Hay que ver cómo estamos educando a nuestros niños para generar valores cívicos y comportamientos de convivencia. Esa responsabilidad la comparten el Estado y la familia, porque eso no se aprende en la calle. Allí vienen las cátedras que se dictaban antes, la famosa Urbanidad de Carreño, las materias de cívica, eso se ha perdido y se refleja en la intimidación escolar, los problemas de los padres con los hijos, etc. Hay que cuestionar también cómo es la educación en aquellas personas que no pueden acceder a instituciones privadas, y ahí vemos las inequidades.Sin embargo, los mismos comerciantes (que cierran sus negocios por la ‘ley seca’) denuncian que hay zonas donde no se hacen controles y se vende licor de forma ilegal...Esto se analizó y se hizo un ajuste para esas zonas donde se presentaron situaciones inadecuadas. ¿Por qué se genera esta cultura de la ilegalidad que tenemos, no solo en Colombia sino en Latinoamérica? Porque falta esa educación juiciosa desde niños. ¿Por qué si hay una norma no la acatamos todos como ciudadanos? Hay muchas razones. Entre ellas, sin justificarla, lo económico y las oportunidades. No digo que eso justifique una acción ilegal, pero sí la motiva y es allí donde yo pensaría que si hubiera igualdad de oportunidades y menos inequidad, estas situaciones disminuirían.Cambiando de tema, hace poco se anunció la suspensión de la Cabalgata de la Feria. ¿Es esa una solución? ¿Debe sostenerse?Aquí el tema es que las personas que asisten a esa Cabalgata no cumplen ni con la regulación ni con el comportamiento adecuado. Cuando uno quiere gozarse un evento, tiene que cumplir con las normas. Si no lo hace, pues se acaba el evento. Muchos se pasan por el cinto la norma. Esos no son ciudadanos para Cali, y no porque tengan recursos tienen derecho a hacer lo que les da la gana. ¿Cómo van las cifras de homicidios en Cali?Las autoridades están trabajando fuerte. Y afortunadamente desde noviembre en Cali el balance es positivo. Si seguimos así, muchos menos caleños van a morir este año. La disminución este año va en un 27 %, que equivale a unos 200 homicidios menos. Esperamos que se mantenga así y por eso también las medidas que se han tomado estos días. Pero todavía hay un rezago de lo que ha pasado en la ciudad en los últimos 20 años, y eso no cambia de un día para otro.Lea aquí las medidas adoptadas por la Alcaldía Municipal para el partido Colombia-Uruguay