Expresan dudas sobre urbanizar predios cercanos al antiguo basuro de Navarro

Vuelve el debate sobre proyecto de vivienda de interés social en la zona de influencia del antiguo basurero. Se abre la polémica.

Nacimientos en los que algunos bebés tenían deformidades. Quejas por alergias y síntomas fuera de lo común. Olores insoportables. Ese fue el panorama en zonas contiguas al antiguo relleno sanitario de Navarro entre el 2004 y el 2008. Así lo recuerda el profesor Miguel Peña, del instituto Cinara de la Universidad del Valle. Lleva no pocos años junto al profesor Fabián Méndez, director de la Escuela de Salud de esta alma máter, advirtiendo que ese terreno constituye una verdadera una bomba de tiempo.Dicho llamado lo reiteró esta semana, en el marco de Agua 2013 (que se realizó en Univalle), en momentos en los que se habla de una iniciativa para urbanizar la zona, llamada Ecociudad Navarro.Se trata de un proyecto que contempla la construcción en esta zona de más de 30.000 casas, centros educativos, hospitalarios y recreativos para los menos favorecidos. Al profesor, que insiste en resaltar el peligro de habitar hoy un sitio como Navarro, muchos lo critican y lo cuestionan. “Me dicen que es que no quiero que la gente pobre tenga casa. Por el contrario, lo que estamos haciendo es advertir que ese no es un sitio apto para que alguien viva. Al menos no por ahora; quizás en un futuro”, dice. “Es un coctel de contaminación. Allí en ese relleno no hay un material ni dos. Hay una mezcla mortal que va desde residuos orgánicos hasta metales pesados”, explica el ingeniero Peña.De acuerdo con el experto, no se trata de algo que se vea inmediatamente. Los efectos podrán evidenciarse con el tiempo, tales como las enfermedades y anomalías en los bebés que se dieron años atrás y que, indica el especialista, están íntimamente relacionados con las condiciones en las que vivía la gente del sector. A este llamado se unió la Contraloría, que por segunda vez hizo un control de advertencia al respecto. “De acuerdo con los estudios técnicos que ha realizado la Contraloría General de la República sobre este proyecto, se reitera el riesgo de daño patrimonial al Estado, a causa de la contaminación ambiental generada por el basurero de Navarro en su zona de influencia y el riesgo para la salud pública, específicamente en el Área de Régimen Diferido (ARD) de Navarro, por la presencia de acuíferos subterráneos, lo mismo que los riesgos por licuación de suelos”, reza el texto (ver recuadro). El profesor Peña añade que “en la constitución se consigna algo llamado principio de precaución. Se refiere a que, ante la incertidumbre, se debe ser cauteloso”. En pocas palabras, lo que el ingeniero argumenta es que, si bien los estudios que hoy hay sobre los riesgos de Navarro no son la última palabra, tampoco existen informes que aseguren con certeza que todo está bien, que vivir allí no representa peligro.El director de Planeación del Municipio, León Darío Espinosa, asegura que todavía no hay nada escrito frente a ese terreno. Que lo que se va a estipular en el POT (Plan de Ordenamiento Territorial) es que se deben hacer esos estudios para verificar si es viable o no emplear ese terreno como zona de expansión. Pero que el que ya tiene resolución del Ministerio es precisamente el Macroproyecto de 64 hectáreas que incluye vivienda de interés social, ubicado a 1,8 kilómetros del relleno. “Para ese tendrán que ponerse de acuerdo CVC y Minambiente”, puntualizó.Control de advertencia:Esta semana la Contraloría General de la República formuló un control de advertencia por el proyecto de Ecociudad Navarro, reiterando otro llamado que había hecho en 2011. En él solicitó a las entidades involucradas en el proyecto, abstenerse de modificar el Plan de Ordenamiento Territorial POT de Cali, para cambiar el uso del suelo del sector objetivo del proyecto, teniendo en cuenta los impactos ambientales de contaminación generados por el basurero de Navarro en el área y los eventuales problemas de salud que puede padecer en un futuro la población que se asiente en la zona.La advertencia se fundamentó en los resultados de las investiga- ciones realizadas por la Universidad del Valle en zona de influencia de Navarro (3 kilómetros).