En Cali, realizan jornada para legalización de predios

El proceso de legalización de propiedades cuenta con el apoyo de la Secretaría de Vivienda de Cali y el Incoder (para el caso de los predios rurales).

Josefina Rivera García cumplió ayer 101 años. Ella, junto con 80 familias más que viven en Bataclán, al oeste de Cali, esperan que de la jornada que realizó la Unidad de Registro Móvil de la Superintendencia de Notariado y Registro obtengan el resultado que lleva esperando hace más de 50 años: que le legalicen la posesión de su casa. En ese lugar, contó su nieto Carlos Julio Vargas Rivera, se criaron hijos y nietos y “aún vienen a jugar los doce bisnietos y ocho tataranietos” de esta mujer centenaria, que huyó de un convento en Popayán y empezó a colonizar este sector de Cali hace 86 años.Según ‘Chepita’ (Josefina García García), nieta de la ‘Chepa’ mayor, “mi abuela llegó a la zona cuando este sector estaba lleno de minas. Ella era la que le vendía la comida a los mineros”.El barrio, explicó Carlos, cuenta con energía y acueducto comunitario y una escuela cercana, la Inmaculada Concepción.“Tenemos esperanza de que esta vez, por fin, sea verdad lo de la titulación, porque esta es una promesa incumplida cada que se avecinan las elecciones”, comentó el nieto de ‘Chepa’.El procesoJorge Enrique Vélez, superintendente de Notariado y Registro, explicó que el objetivo de estas jornadas de asesoría móvil es ampliar la cobertura del servicio registral y crear una cultura de formalización de la propiedad inmobiliaria rural y urbana.Juan Martín Alvarado, coordinador regional de la Unidad de Registro Móvil en la región, dijo que a diario se atienden unas 200 personas, todas con casos diferentes sobre la legalidad de su bien.“En el caso de doña Josefina estamos trabajando con la Alcaldía de Cali para determinar cómo se hará la legalización de la posesión, debido a que estas familias viven dentro del ecoparque de Bataclán”, explicó.De acuerdo con el funcionario de la Superintendencia, los casos que se han atendido en Cali tienen relación con invasiones de vieja data que reclaman la legalización de la posesión o problemas con la venta de inmuebles que se quedaron en la promesa de compraventa.Este es el caso de Adiela Valderrama, una de las damnificadas de la explosión del 7 de agosto de 1956, quien vive en la Unidad Residencial Bueno Madrid y que no ha obtenido la escritura debido a que la Fundación Ciudad de Cali fue liquidada y no hizo el traspaso del bien.El proceso de legalización de propiedades cuenta con el apoyo de la Secretaría de Vivienda de Cali y el Incoder (para el caso de los predios rurales).