Viaje a San Cipriano, un pueblo de exportación entre ríos y montañas

Una delegación de diez personas provenientes de África visitó la zona para replicar en sus países este modelo de turismo ecológico.

A tres horas de camino desde Cali, entre montañas y ríos, se encuentra San Cipriano, un caserío de 377 habitantes que junto a la vereda de Bodegas hace parte desde 1979 de la Reserva Forestal Protectora de los ríos Escalerete y San Cipriano. Belisario Hinestroza, un hombre de piel canela, risa tímida, cuerpo fibroso y manos rudas, trabaja allí desde hace quince años manejando una ‘brujita’. Se trata de un vehículo de madera típico de la zona que transporta a los viajeros por los rieles del Ferrocarril del Pacífico, a través de un sistema de balineras que es impulsado por una motocicleta.Pero este no es el único medio de subsistencia de los pobladores de esta vereda del pacífico colombiano. Así lo explica Didier Valencia, de 24 años, habitante de San Cipriano, quién afirma que “nosotros también hospedamos a los turistas en las cabañas y hacemos recorridos por los diferentes atractivos naturales de la zona. Además de la siembra de plátano, banano y otros frutos, que les vendemos a los comerciantes de la zona para atender al visitante”.Precisamente, con el ánimo de conocer el proceso de desarrollo de la comunidad en San Cipriano y poder realizar proyectos similares en sus países de origen, una delegación africana de diez personas provenientes de Bosuana, Uganda, Sudáfrica, Tanzania y Kenia, visitó esta semana este rincón del Valle del Cauca, a 40 minutos del puerto de Buenaventura.La comitiva estuvo acompañada de funcionarios de la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional de Colombia, la CVC y el Sena, en el marco del proyecto Ruta de Aprendizaje y Emprendimiento Juvenil para el África.De acuerdo con María del Mar Gutiérrez, de la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional, la Ruta de Aprendizaje “nació de una iniciativa del Gobierno Nacional bajo la necesidad que se ha visto en países africanos con índice alto de desempleo juvenil. Se invitó a estos cinco países de África para que conocieran el funcionamiento de San Cipriano”.Uno de los integrantes de la delegación del continente africano, Stive Alguberi, ministro de juventudes de Sudáfrica, dijo que “el caso de San Cipriano es de resaltar por la disciplina y el compromiso de la comunidad”. También destacó el trabajo en comunidad de los habitantes de esta vereda y explicó que “muchos proyectos en el mundo fracasan por las peleas entre la comunidad. Esto no sucede acá”. Agregó que se tienen proyectos parecidos en su país y realizó la invitación a las agencias de Colombia para que vayan a Sudáfrica con el objetivo de ver los casos de éxito similares allá. Por su parte, Gloria Estela Gómez, coordinadora nacional del Programa Jóvenes Rurales Emprendedores del Sena, dijo que “San Cipriano es una clara muestra de un trabajo, no solo de jóvenes, sino de la comunidad en general en el manejo ambiental y el desarrollo de proyectos productivos”.La visita de la delegación africana a San Cipriano “no solo es importante para la comunidad de esta zona sino también para el departamento. Porque esta es una comunidad que le ha apostado desde hace 30 años al tema de la conservación de los recursos naturales”, dijo Jorge Antonio Viveros, administrador ambiental de los Recursos Naturales de la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca, CVC. El funcionario destacó que en pocas ocasiones los procesos comunitarios han sido reconocidos en Colombia. Agregó que “estamos frente a un modelo que podría revolucionar el manejo de las áreas protegidas, lo que permite trabajar con las comunidades de las partes bajas en el manejo de los recursos naturales”.No se descarta que este tipo de modelos se puedan replicar en otras zonas del país, concluyó Viveros.