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La recta Cali-Palmira es una de las vías que presentan mayor accidentalidad en el Valle del Cauca, dado el alto flujo de vehículos que se presenta diariamente, según el secretario de Movilidad del departamento, Andrés Lañas. | Foto: José Luis Guzmán / El País

ACCIDENTES DE TRÁNSITO

Muertes en accidentes de tránsito se han reducido un 25% en el Valle

Motociclistas y peatones aún son las víctimas más frecuentes de accidentes viales. El exceso de velocidad es la causa principal, según Observatorio Nacional de Seguridad Vial.

4 de octubre de 2020 Por: Redacción de El País

Un total de 433 muertes por accidentes viales en el Valle del Cauca entre enero y agosto de este año es el balance más reciente que ha arrojado el Observatorio Nacional de Seguridad Vial, es decir, el 14 % de las 3.088 muertes que se han presentado en Colombia por esa misma causa.

Dicha cifra hace que el Valle del Cauca sea la región más afectada en ese sentido, seguida de Antioquia (375 muertes) y Cundinamarca (224). Esto, pese a una significativa reducción de 145 casos respecto al mismo periodo del año pasado, o sea un menos 25 %.

“La mayor razón de por qué ese nivel de accidentalidad es el exceso de velocidad que se facilita por la configuración particular de nuestras vías: planas, rectas y de doble calzada”, aseveró Andrés Lañas, secretario de Movilidad del Valle del Cauca.

De acuerdo con el Observatorio, en el departamento las principales víctimas de accidentes mortales son los motociclistas, con un 53,8 % de prevalencia.

Precisamente, una de las vías en donde más se cobra la vida de estos dos actores es el corredor que conecta Cartago con Risaralda. Otras vías críticas en el Valle del Cauca son el tramo entre Buga-Tuluá, dado que es la parte más estrecha de la doble calzada; la Cali-Palmira al ser una de las más transitadas de la región; la vía al Mar, que atraviesa diferentes poblados de Dagua y Cali; y el municipio de Obando, que es atravesado por la vía nacional.

Pero el Observatorio también destaca que en el Valle -al igual que el resto del país- hubo una considerable reducción de las muertes por siniestros viales durante la pandemia. Por ejemplo, mientras en enero se registraron 88 casos, esta cifra se desplomó a apenas 35 en el mes de abril.

“Si bien las restricciones en la movilidad ayudaron a bajar las cifras de accidentalidad en los últimos cinco meses, también es cierto que los controles tuvieron una buena incidencia en ese sentido. Y ahora que está reactivado un tránsito más flexible desde el pasado 1 de septiembre, contamos con 55 agentes, dos supervisores y cuatro inspectores, así como 400 miembros de la Policía de Carreteras”, afirmó Lañas.

Sin embargo James Gómez, director de proyectos de UrbaVial, empresa especializada en seguridad vial, se mostró un poco reticente frente a esta posición al señalar que la reducción fue solamente un resultado de la cuarentena.

Y es que según el Observatorio, después de que el mes de abril registrara 35 casos, hubo un ligero aumento en agosto, con 53 muertes por accidentes en las vías del Valle, es decir, a medida que empezó a haber más flujo de vehículos mientras el aislamiento social obligatorio se volvía más flexible a nivel nacional y departamental.

“Además del exceso de velocidad, los otros factores que agravan la siniestralidad vial en la región es que contamos con ciudades intermedias con una población superior a 100.000 habitantes, lo que hace que haya mucho movimiento de personas y mercancía. A esto se suma que algunas carreteras tienen problemas de diseño que no le permiten al conductor reaccionar adecuadamente tan pronto pierde el control del automotor”, explicó Gómez.

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La meta para el 2020 en cuanto a rescatar vidas en las carreteras del Valle
es de 80, especialmente las del peatón, que en total se espera que rescaten un total de 25.

El experto en seguridad vial también recalcó la preocupación que provoca el crecimiento del transporte informal durante la cuarentena, estimado en un 100 % en todo el país, según las autoridades de tránsito.

“Eso no solo implica un riesgo para el pasajero, dado que en esas condiciones no se cuenta con una garantía en caso de accidentes o de bioseguridad frente al covid, sino que también puede aumentar los indicadores de siniestralidad al ser un modelo que no está regido bajo ninguna norma”, agregó.

Otro punto sobre que llama la atención en el informe del Observatorio es que los usuarios de bicicletas son los terceros más afectados dentro de los muertos por accidentes viales en el Valle, con un total de 49 entre enero y agosto, lo que corresponde a un 11.3 % de los casos.

Janeth Mosquera, docente de la Universidad del Valle y coordinadora del Observatorio del Ciclista y el Peatón, explicó que si bien no hay investigaciones que den razones certeras de por qué la vulnerabilidad de esta población, una explicación razonable es el exceso de velocidad.

“Según ha demostrado la literatura de otras partes del mundo, reducir la velocidad del tráfico en toda una ciudad es la medida más eficiente, porque ¿de qué nos sirve mejorar el comportamiento de los conductores, si van a 60 o 70 km/h, lo que no le da tiempo al peatón para reaccionar?”, se cuestionó Mosquera.

La experta acotó: “Es muy posible que si bien ha habido menos flujo de carros en el marco de la emergencia sanitaria, es precisamente por esa razón que algunos conductores se confiaron hasta el punto de ir a velocidades superiores a las permitidas”.

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En esta opinión coincidió Luis Felipe Lota, director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, ANSV, quien indicó que la segunda causa de mayor accidentalidad es el no respeto a las señales de tránsito.

“Si ordenamos las señales por las que menos son respetadas serían: no adelantarse en zonas prohibidas, el pare y el llamado a no conducir en contravía. Un poco más bajo entre las causales encontramos el operar el vehículo bajo los efectos del alcohol”, precisó Lota.

El director de ANSV añadió: “Un reto muy importante para esta nueva normalidad es el auge de la movilidad individual, ya sea como peatón, motociclista o ciclista, y es que sean más visibles para los otros actores viales, sobre todo en las horas en donde se presenta más mortalidad -entre las 6:00 de la noche y 6:00 de la madrugada-, debido a la falta de iluminación, sin olvidar tampoco la vulnerabilidad de los peatones de la tercera edad”.

Los domingos son los días más complejos respecto a muertes por accidentes viales en la región, con un total de 93 hasta la fecha, según cifras oficiales.

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