Investigan fábrica clandestina de pólvora en Palmira donde resultó quemado un niño

Las autoridades abrieron una investigación este lunes en Palmira luego que un menor de 13 años resultara con algunas quemaduras leves en su cara y brazos al manipular pólvora.

Según se conoció, el joven trabajaba en una fábrica clandestina de pólvora en una residencia ubicada en la Calle 43B con Carrera 5E, del barrio Los Cristales, al oriente de la ciudad, donde  un hombre, quien al parecer había llegado de la zona rural, montó la fábrica de totes, diablitos y culebras, entre otros elementos.

De acuerdo con la información conocida por El País, el menor de 13 años estaba manipulando unos totes  y sufrió irritación en sus ojos debido a la combustión de unos gases compuestos de pólvora, así como quemaduras en la cara y los brazos, por lo que fue conducido al hospital local, Raúl Orejuela Bueno, donde le hicieron un lavado y curaron sus heridas.

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Afortunadamente, las lesiones no fueron de consideración y fue dado de alta.

Sin embargo, lo que prendió las alarmas de las autoridades locales y de la Policía de Infancia y Adolescencia, es que en este mismo lugar laboran otros tres menores de edad.

Al respecto, el capitán (r) Maller López, de la secretaría de Seguridad, dijo que esta situación ha hecho que se estén estudiando algunas medidas las cuales serán expuestas este miércoles en el consejo de seguridad para prohibir el uso de la pólvora en la localidad y sancionar a las personas que infrinjan la norma.

"Este caso aunque afortunadamente no causó lesiones graves al menor, sí hace necesario que se tomen medidas urgentes porque no ha empezado el mes de diciembre y ya se nos presentó este incidente, además, lo más preocupante es que tenemos información de que un adulto está fabricando y empacando pólvora para lo cual utiliza menores de edad", sostuvo el funcionario.

Dijo también que esta persona utiliza a jóvenes entre los 13 y 16 años para distribuir y transportar estos elementos a tiendas y otros sitios de expendio.

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"Ya estamos con el grupo de Policía judicial de Infancia y Adolescencia haciendo la investigación porque vamos a tomar las medidas pertinentes para ubicar esta persona, cerrar esa fábrica clandestina que no tiene ningún tipo de permiso y para exponer este caso porque no puede ser que un menor esté siendo instrumentalizado por un mayor de edad para que lo haga y no pase nada", enfatizó.

De otro lado, Fabio Mejía, secretario de Gobierno, agregó que han venido trabajando desde su despacho desde el mes de septiembre para evitar estos hechos y por eso se expidió el decreto 339 del 13 de octubre del 2017 que prohíbe y sanciona la venta y uso de la pólvora.

"El niño, el mayor de cinco hermanos, queda solo en la casa y él se va a la casa de un señor de 65 años donde presuntamente estaba trabajando y empacando 200 totes y lo que llama la atención es que es con otros niños más. Iniciamos el proceso con la Comisaría de Familia y se abrió una historia por maltrato infantil y se entrevistó al niño con una psicóloga y él manifiesta que el señor lo estaba poniendo a empacar los totes con otros muchachos. Ya trasladamos a la Fiscalía todo este caso", explicó.

La madre del menor negó saber que su hijo estuviera trabajando en ese lugar.

Sin embargo, será investigada por maltrato infantil y por negligencia y el dueño del negocio tendrá consecuencias penales si se comprueba que utilizaba menores para un trabajo de alto riesgo.