Huellas de Paz avanza exitosamente en el Valle del Cauca

Huellas de Paz, es un proyecto que desde el año 2011 se viene realizando en varios Departamentos del país, entre ellos el Valle del Cauca, con aportes de la Embajada Española en Colombia, la Oficina Técnica de Cooperación AECID, entre otros.

El proyecto Huellas de Paz ha beneficiado a 871 caficultores de los municipios de Riofrío, Sevilla y Bugalagrande, en el departamento del Valle del Cauca. Para esta iniciativa se construyeron 57 sistemas individuales de tratamiento de aguasresiduales SITAR y se capacitaron 40 líderes en convivencia armónica y resolución pacífica de conflictos.Cabe recordar que la iniciativa Huellas de Paz, es un proyecto que desde el año 2011 se viene realizando en varios Departamentos del país, entre ellos el Valle del Cauca, con aportes de la Embajada Española en Colombia, la Oficina Técnica de Cooperación AECID, la Fundación Humanismo y Democracia y la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, tiene como objetivo contribuir a la protección y a la realización efectiva de los derechos económicos, sociales, culturales, políticos y civiles de las familias campesinas en la cuenca del Río Cauca y el Macizo Colombiano.Este convenio tiene una duración de cuatro años, por lo que se espera que para el 2014 se consiga fortalecer el capital social y la gobernabilidad democrática; mejorar las condiciones de salubridad en las comunidades rurales;aumentar la eficiencia y la competitividad de la actividad productiva e impulsar la adopción de prácticas que contribuyan a la preservación y recuperación de las microcuencas hídricas que vierten al Río Cauca.En el Valle del Cauca, a través de la capacitación a líderes comunitarios, se realizó una intervención social fomentando entre los beneficiarios principios como el respeto, honestidad, tolerancia y solidaridad.Doris Amparo Reyes Sánchez, beneficiaria de la iniciativa asegura que hacer parte del convenio Huellas de Paz es un gran honor porque ha podido aprender sobre temas como liderazgo, resolución pacífica de conflictos, Derechos Humanos y valores. "Lo que más me motiva es que cuando regrese a mi finca voy a poder compartir con la comunidad estos conocimientos y entre todos vamos a construir un espacio donde prime la paz”, agregó.