Con aislamientos buscan garantizar el agua en Palmira

De manera conjunta sector privado y la comunidad de Palmira están realizando un programa para garantizar la producción de agua en la cuenca del río Nima. Ya hay 232 kilómetros protegidos.

Un total de 232 kilómetros de la Cuenca del Río Nima se encuentran protegidos como parte de un programa ambiental que pretende garantizar el abastecimiento de agua tanto para el uso humano como para cultivos y otros usos.El avance se puso al descubierto durante un recorrido que las autoridades ambientales realizaron ayer por la zona montañosa del municipio de Palmira, donde hasta el momento se tienen 204 aislamientos, según indicó Margarita Vallejo, directora de la Asociación de Usuarios del Río Nima, Asurnima.A través del programa denominado Línea Amarilla se están aislando los nacimientos de agua en la parte alta de la cuenca con el objetivo de reforestarla y garantizar la renovación del recurso hídrico.En conjunto con Asociación de Cultivadores de Caña de Azúcar, Asocaña y la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca, CVC, se aíslan los nacimientos y reforestan. De manera alterna, se está trabajando también en un componente social que consiste en la generación de empleo para la comunidad residente en las zonas donde se realizan los aislamientos.Como resultado del programa se ha podido establecer que, además de preservar la vegetación, a lo largo de diez años se recupera 1.4 litros por segundo en un aislamiento de diez kilómetros.En cuanto a la financiación, se conoció que se está haciendo a través de la Asurnima, con aportes voluntarios de usuarios del afluente como pequeños agricultores, la empresa del acueducto de Palmira, Acuaviva y, en un 80%, cañicultores.En este sentido, a través del Fondo Agua por la Vida y Sostenibilidad se está apoyando a las cuencas que presenten proyectos. De una primera convocatoria este año se seleccionaron cinco proyectos que se están financiando con $500 millones y hay una cifra igual para impulsar un mismo número de beneficiados.Pedro Moreno, coordinador del Fondo, señaló que actualmente se cuenta con el apoyo de trece ingenios azucareros que realizan sus aportes para promover los programas ambientales en las cuencas de la región.Álvaro Gómez, representante del Ingenio Pichichí, dijo tras realizar el recorrido se mirará cuáles de las experiencia de Palmira se pueden aplicar en la cuencas de los ríos Guabas, Yotocó, Mediacanoa, Tuluá, Morales y Sabaletas, que son las más cercanas al entorno de esa factoría.“Hemos hecho algunas actividades parecidas, pero no con tanto éxito”, agregó el vocero, tras resaltar que le sorprendió la regeneración del bosque nativo alrededor de los nacimientos. De igual manera, a través de Asurnima se tiene apadrinada la escuela Rosario Meneses en la vereda los Cuchos del corregimiento Calucé con el objetivo de evitar la deserción escolar a través del apoyo para mantener una infraestructura adecuada para los niños. También se está haciendo educación ambiental con el estudiantado desde hace quince años, recordó la directora de Asurnima. Geisa Oviedo, profesora del centro docente, confirmó que con frecuencia se realizan charlas pedagógicas y prácticas de siembra de árboles en el sector de la Hacienda Miraflores, a 1.700 metros sobre el nivel del mar.A su turno, Johan Martínez, estudiante de quinto grado, subrayó que lo más importante que ha aprendido es el manejo del agua y la conservación de la naturaleza.