Por 50 mil votos, el No le ganó al Sí en el plebiscito

El No a los acuerdos gana con más de 6 millones 400 mil votos, la mitad del electorado. El Sí se quedó con el 49% de los votos.

En un hecho sin antecedentes en la historia del país, los colombianos le dijeron No en las urnas al acuerdo de paz con el que se buscaba poner fin al conflicto que el Estado y la guerrilla de las Farc han sostenido durante 52 años.

Contabilizado el 99.98 % de los votos depositados por los ciudadanos que participaron en el plebiscito de paz convocado por el Gobierno, el No a los acuerdos gana con 6'431.376 votos, que equivalen al 50,2% del total.

El No fue determinante en 13 departamentos de todo el país. Ellos son Antioquia, Santander, Norte de Santander, Caldas, Risaralda, Quindío, Tolima, Cundinamarca, Casanare, Arauca, Meta, Huila y Caquetá. 

Por su parte, el Sí se queda con 6'377.482 votos que representan el 49,7% de toda la votación.

El Valle fue uno de los departamentos que apoyó los acuerdos con las Farc con el 52% de los votos, frente un 47% del No. 

Poco más de 13 millones de colombianos depositaron el voto en las urnas, un 37.40% del potencial de sufragantes para esta jornada: 34.899.945.

En su balance final de las votaciones, la directora de la Misión de Observación Electoral, MOE, Alejandra Barrios, atribuyó la poca afluencia de votantes a la situación climática del país. 

Indicó que la zona Caribe fue la más afectada por las lluvias, dado que se tuvieron que trasladar varios puestos de votación, como en Bogotá (15), Fundación (3), zona rural de Santa Marta (2), y Pasto (1). 

El resultado deja en el limbo el 'Acuerdo para la terminación del conflicto y el logro de una paz estable y duradera', como se denomina el documento que firmaron el Gobierno y las Farc luego de cuatro años de complejas negociaciones.

La aprobación del acuerdo en las urnas era necesario para que el Presidente de la República pudiera emprender todas las reformas que se acordaron con la guerrilla.

Aunque los miembros del uribista Centro Democrático, principales impulsores del NO, sostienen que es posible renegociar el acuerdo, tanto el Gobierno como la guerrilla han dicho que no hay cabida para una revisión de lo acordado.

Así las cosas, Colombia queda sumida en una situación de gran incertidumbre política, pues la posibilidad de poner fin al conflicto dependerá ahora expresamente de la voluntad de la guerrilla de las Farc.

Los primeros ecos del triunfo del No

Los colombianos dijeron estar cansados de la guerra, pero muchos rechazaron hacer concesiones a las Farc.

Uno de los convencidos por el 'No' fue José Gómez, un pensionado de 70 años consultado por la AFP: "Es absurdo premiar a unos criminales narcoasesinos que han hecho al país un desastre", dijo.

"Ganó el odio, ganó el odio a las Farc. Quedamos sumidos en una profunda crisis política y con unas consecuencias económicas muy negativas", indicó a la AFP Jorge Restrepo, director del centro de análisis Cerac. 

Ahora son las Farc las que "decidirán si siguen con el desarme, la reintegración y el cese el fuego bilateral", añadió, en alusión al proceso iniciado con supervisión de las Naciones Unidas en cumplimiento de lo estipulado en el marco del acuerdo ya sellado. 

En la sede de la campaña por Sí, en el emblemático hotel Tequendama en el centro de Bogotá, se vivía un clima de luto. 

Con el acuerdo, los 5.765 combatientes, según cifras de la guerrilla, iban a concentrarse en 27 sitios para su desarme y posterior reinserción a la vida civil. Pero ahora, no se sabe en qué queda este plan del Gobierno.

"Nadie estaba preparado para esto, no había plan B. Ahora no sabemos qué puede pasar, pero está claro que las condiciones que se les dio a las Farc para el acuerdo han pesado mucho y la falta de movilización del electorado colombiano también", dijo a la AFP el ingeniero Jorge Cifuentes, de 55 años.