Congresistas ya sabían cómo votar curules de paz antes de empezar los debates, revela encuesta de la MOE

Dos meses antes de que el proyecto de Acto Legislativo que creaba 16 Circunscripciones Especiales de Paz se debatieran y fueran votadas en el Congreso de la República, ya los parlamentarios sabían cómo iban a votar.

Así quedó evidenciado con la segunda encuesta realizada por la Misión de Observación Electoral (MOE) al 75 % de los congresistas, que demuestra las diferencias entre lo que piensan y lo que votan al final.

En el desarrollo del estudio se preguntó por el nivel de acuerdo o desacuerdo con la aprobación de las curules de paz y el 50,3 % consultado las aceptaba.

La polarización manifiesta frente al tema explica la polémica con la aprobación de este proyecto de ley que daba vida a las 16 curules por dos periodos consecutivos para líderes de víctimas del conflicto armado y el debate jurídico sobre su aprobación o no.

Se evidenció, precisa el informe de la MOE, que mientras en la Cámara la aprobación tenía un apoyo del 51,9 %, en el Senado ascendía al 47, 2 %.
Sobre el sistema de elección de los magistrados que conformarían el Tribunal Especial de Paz y los 170 municipios escogidos para los Planes de Desarrollo con enfoque territorial, la idea positiva era de 53,2 % y 52 %, respectivamente.

Los temas en los que tenían una opinión desfavorable fueron: que las Zonas Veredales Transitorias de Normalización se transformaran en asentamientos permanentes (65, 5 %), los recursos que se le dan a la Farc para el funcionamiento de su partido político (64 %), que en las circunscripciones de paz no pudieran presentarse los partidos tradicionales (57,5 %) y, no estaban de acuerdo con los municipios que conformarían las circunscripciones (57 %).

“Estas últimas preguntas demuestran que el trámite de las circunscripciones tenía una fuerte oposición independientemente del partido político”, concluye el informe de la MOE.

Para Alejandra Barrios, directora de la organización, mientras que las posiciones de los partidos en contra de los desarrollos del Acuerdo de Paz marcan una tendencia fuerte, quienes se supone defienden las tesis del mismo, plantean posiciones matizadas; esto podría explicar las dificultades que tuvieron estos debates en el Congreso de la República”.