Otra expropiación

Bajo el argumento de hacerles “un justo reconocimiento a los trabajadores y al pueblo boliviano que ha luchado por la recuperación de los recursos naturales y los servicios básicos”, Evo Morales decretó la expropiación de la Red de Energía Española.Y lo hace en medio de la huelga generalizada de sindicatos que demandan mejoras salariales y de otra protagonizada por los indígenas que protestan por la construcción de una carretera en el Amazonas.La medida populista de Morales parece tomada más para aplacar a los trabajadores y a las comunidades que hoy son sus mayores detractores, y para desviar la atención sobre la crisis política, económica y social que padece la nación suramericana.Sin entender que expropiaciones como ésta no solucionan los verdaderos problemas del país y que por el contrario afectan la credibilidad en los mercados internacionales y debilitan aún más la empobrecida economía boliviana.