No más Caprecom

No se entiende por qué el Gobierno Nacional permite que una entidad insolvente como Caprecom siga prestando un servicio tan importante como la salud.Que se le niegue a una persona con cáncer el tratamiento que requiere o la atención inmediata a cualquier otra enfermedad es una falta de humanidad, que no puede excusarse en los problemas económicos que atraviesa la entidad. Entre todos sus enredos, la EPS del Estado le debe $30.000 millones al HUV y miles de millones más a la red de hospitales del Valle.Y los usuarios están pagando por los malos manejos, la corrupción y politiquería que se apoderó de Caprecom.Sin embargo, si esa entidad no tiene cómo asumir, es responsabilidad del Estado resolver el problema y defender a sus afiliados. A propósito, ¿en qué está la Reforma a la Salud que prometieron como una solución a la crisis que enfrenta el sistema?